Ginebra, 16 feb (.).- La directora general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Ngozi Okonjo-Iweala, aseguró que hay un "espíritu constructivo" en torno a las negociaciones sobre cuestiones alimentarias y agrarias de cara a la XIII Conferencia Ministerial de Abu Dabi (26-29 de febrero), aunque reconoció que obtener resultados en este campo será difícil.
"Es una cuestión muy ligada a cada país, todos tienen una población campesina fuerte e influyente. Incluso aunque signifique una pequeña parte del PIB, la agricultura emplea a mucha gente y es central para sus economías", analizó en un encuentro con un reducido grupo de medios, entre ellos EFE, para analizar la reunión de Abu Dabi a menos de dos semanas de su inicio.
Con todo, la economista nigeriana aseguró que en las negociaciones agrícolas en el seno de la OMC ha visto "por primera vez un espíritu constructivo en las negociaciones", después de que en la anterior cumbre de ministros de Comercio de la organización, en 2022 en Ginebra, apenas hubiera avances en la materia.
"Hemos hecho esfuerzos en los últimos 20 años pero no hemos sido muy afortunados, sí conseguimos un avance histórico en materia pesquera con mucho trabajo, y ahora lo estamos intentando con la agricultura", comentó.
A nivel más amplio, Okonjo-Iweala consideró que la cumbre llega en un momento complicado para la negociación, con una situación económica y comercial dificultada por la guerra en Ucrania, la conflictiva situación para el transporte marítimo en el Mar Rojo, la inflación persistente y los altos precios de los alimentos.
La recesión en Reino Unido y Japón, el freno en economías de la Unión Europea (UE), EE.UU. y China, o el hecho de que este año sea de elecciones para medio centenar de países (entre ellos los Estados Unidos) suponen otros obstáculos, reconoció la máxima responsable de la OMC, quien pese a ello aseguró que hay buenas intenciones de negociar.
"Se respira un ambiente más constructivo que antes de la XII Conferencia Ministerial. Pero hay todavía grandes desafíos por superar, dificultades en muchas negociaciones, por lo que esa atmósfera optimista debe acompañarse de una dosis de realismo, las posiciones están alejadas", analizó.
Hace dos años, en la ministerial de Ginebra, que coincidía con los peores momentos de alza de los alimentos por la guerra de Ucrania, los miembros de la OMC únicamente se pusieron de acuerdo en materia agrícola con una declaración que pedía no imponer prohibiciones o restricciones a la exportación en ese sector.
Algunas de las mayores diferencias en las negociaciones se dieron en la cuestión de las reservas públicas de alimentos que tienen países en desarrollo como la India, que algunos países desarrollados consideran que distorsionan el mercado mundial, especialmente en momentos como los actuales de difícil suministro.
Queda por ver si la ebullición del sector que estos días se vive en Europa, con protestas de agricultores en muchos países de la Unión Europea, añadirá presión a unas negociaciones históricamente bloqueadas en el seno de la OMC.
Tras una relativamente exitosa conferencia ministerial hace dos años, los analistas apuntan a que en esta ocasión podría haber menos resultados que los cosechados 2022, cuando se logró, entre otras cosas, un histórico acuerdo para la eliminación progresiva de los subsidios globales a la pesca, tras 20 años de negociaciones.
En Abu Dabi se seguirá negociando en esa materia, ya que todavía no hay consenso en la eliminación de ciertos subsidios, por divergencias aún entre países en desarrollo y desarrollados sobre los tiempos de adopción del acuerdo y las ayudas que aún podrían mantenerse.
También se negociará, para completar otros logros de Ginebra, la posibilidad de extender la suspensión de las patentes de las vacunas anticovid también a tratamientos y diagnósticos, algo que no se ha logrado consensuar en dos años de debates entre los miembros de la OMC.