San Juan, 30 may (EFE).- El banco puertorriqueño Doral Bank, que se encuentra inmerso en una pugna con el Gobierno de la isla por el pago de 232 millones de dólares que la entidad bancaria dice que le deben las autoridades locales, subió hoy casi un 40 % en la Bolsa de Nueva York.
Las acciones del banco cerraron este viernes a 3,93 dólares cada una, un 39,36 % más caras que el precio al que se cambiaban el jueves, aunque en las operaciones electrónicas que tenían lugar después del cierre de mercado neoyorquino caían en torno a un 2 %.
El banco, que afronta graves problemas de liquidez, rehusó hoy una vez más hacer comentarios sobre esta inusual subida, argumentando que no se pronuncia sobre movimientos extraños en la Bolsa.
En cualquier caso, este banco con sede en San Juan acumula una caída del 59 % en el último mes y del 65 % en los últimos tres meses. En el periodo de un año sus acciones se han negociado a un mínimo de 1,8 dólares y un máximo de 25 dólares.
La drástica caída bursátil registrada este mes tuvo lugar después de que las autoridades federales le dijeran que no podía incluir en sus cuentas los 232 millones de dólares que alegaba que el Gobierno le debe por haber pagado impuestos en exceso en el pasado.
A raíz de ahí comenzó un tira y afloja con el Gobierno de Puerto Rico, que considera nulo el acuerdo que ambas partes firmaron en ese sentido.
Mientras, el banco, que ha visto caer las calificaciones de su crédito hasta el nivel especulativo ("chatarra" o "basura"), contrató al ex subsecretario de Comercio de EE.UU. Robert Shapiro para que le ayudara en esta pugna.
Shapiro dijo públicamente esta semana que el Gobierno de Puerto Rico se estaba jugando su credibilidad con este conflicto y que estaba "obligado legal, política y moralmente" a pagar la cantidad que le reclama el banco, que en paralelo está vendiendo activos para tratar de hacerse con liquidez cuanto antes.
Además, Shapiro comparó a la isla en este sentido con Argentina y advirtió que no le conviene nada esta actitud si lo que quiere es atraer inversión extranjera que le ayude a superar la crisis que atraviesa.
Estas declaraciones hicieron que el jueves el secretario del Departamento de Desarrollo Económico y Comercio de Puerto Rico, Alberto Bacó, reaccionara y acusara al banco de estar haciendo "chantaje" al Gobierno.