París, 22 feb (.).- La compañía estatal francesa EDF (PA:EDF) deberá pagar 300 millones de euros en concepto de multa por haber abusado entre 2004 y 2021 de su posición de monopolio como proveedor de tarifas reglamentadas de electricidad para hacer ofertas comerciales en los sectores donde sí compite con otros operadores.
Tras una denuncia de uno de esos competidores, Engie (PA:ENGIE), la Autoridad de Competencia sentenció hoy que EDF abusó de los medios de los que disponía como proveedor de las tarifas reglamentadas por el Estado y utilizó los datos de sus clientes para hacer ofertas más adaptadas en el mercado del gas y otros servicios energéticos.
"Al utilizar los recursos humanos y técnicos de las tarifas reglamentadas, algo que no podían hacer sus competidores, EDF se benefició de una ventaja competitiva", señaló la Autoridad de la Competencia en su dictamen.
"Esas prácticas -concluyó- contribuyeron así a consolidar su posición en el sector energético y a retrasar el desarrollo de proveedores alternativos".
El objetivo, según este organismo, era mantener su cuota de mercado en el sector del suministro de electricidad y reforzar su posición en los mercados conexos del gas y de los servicios energéticos.
Tras la investigación del órgano de la competencia, EDF asumió los hechos que se le reprochan y solicitó beneficiarse de un procedimiento de conciliación, lo que le ha permitido obtener una sanción económica dentro de una horquilla negociada.
La empresa energética se ha comprometido, además, a poner a disposición de otros proveedores eléctricos su fichero de clientes con tarifas reglamentadas, así como a separar los procedimientos de suscripción de clientes que contraten estas tarifas a los que comparan las ofertas del mercado.
Estos compromisos son los que han llevado a la Autoridad a reducir la sanción a EDF y sus filiales a 300 millones de euros, con la obligación igualmente de prolongar esas acciones durante tres años, con posibilidad de renovación.