Madrid, 15 dic (.).- Uno de cada dos inquilinos quiere comprar una vivienda, pero su situación económica se lo impide, según un estudio de Fotocasa que refleja "la fuerza que tiene el sentimiento de propiedad entre los particulares" y "la gran frustración por parte de los inquilinos".
El informe "Experiencia en alquiler 2021" constata que los principales obstáculos para la compra de una vivienda son la precariedad laboral y la imposibilidad de ahorrar para hacer frente a los costes de la inversión inicial de una hipoteca.
Según Fotocasa, esto hace imprescindible que desde la administración pública se adopten medidas que fomenten las rentas asequibles para que los inquilinos puedan tener opción de ahorro, ya que en tan solo cinco años los españoles han pasado de destinar un 28 %, a un 41 % de su salario a pagar el alquiler.
El portal señala que hay un 26 % de personas que se decantan por el alquiler por la libertad y flexibilidad que les otorga, frente al 21 % de 2020. Otro 25 % lo prefiere por motivos de movilidad laboral y un 17 % porque descarta la compra.
Entre los ofertantes también la motivación económica es la principal a la hora de poner una vivienda en alquiler: el 65 % lo hace porque es una fuente de ingresos y otro 39 % por la rentabilidad que ofrece, porcentajes muy similares a los de 2020.
Otro de los aspectos que incentiva a los propietarios a arrendar una vivienda es la preferencia porque esté ocupada y un 39 % apunta a este motivo, una cifra que ha ido creciendo progresivamente en los últimos años (en 2018 eran del 33 %).
Respecto a los plazos de tiempo que invierten los inquilinos en encontrar una vivienda, siete de cada diez consiguen alquilar un inmueble en un mes, una cifra similar a la de 2020- y solo un 17 % de ellos tarda más de dos meses en completar el proceso.
En el lado de la oferta sí que se ha producido una dilatación de los plazos del proceso de arrendamiento de vivienda desde la aparición de la crisis sanitaria de la Covid-19, ya que un 37 % de los que han alquilado o intentado alquilar un inmueble de su propiedad han dedicado al proceso menos de dos semanas, lo cual significa once puntos porcentuales menos que el 48 % registrado en febrero de 2020, justo antes de la pandemia.
Además, por encima de los dos meses de plazo hay ahora un 25 % de arrendadores (o aspirantes a serlo), frente al 17 % de 2020.