Madrid, 27 abr (.).- El acceso económico a la vivienda se complicará aún más después de la crisis de Covid-19 y no solo en España, sino a nivel europeo y mundial, aunque éste es el país de Europa con mayor número de hogares que tienen que destinar más de un 40 % de sus ingresos netos a los costes asociados a una vivienda.
Así lo advierte el informe "Covid-19, impacto en el sector inmobiliario", elaborado por el Urban Land Institute (ULI), que recuerda que, a su vez, España es el país que tiene la menor proporción de viviendas sociales en alquiler de la Unión Europea, un 1,25 % frente al 20 % europeo.
La vivienda se considera como asequible cuando el esfuerzo realizado para su pago no sobrepasa el 30 % de los ingresos familiares disponibles.
El informe recoge que el acceso económico a una casa será más difícil en especial para jóvenes y familias con bajos ingresos y que por eso los nuevos modelos de viviendas en alquiler, como el 'built to rent' (construir para alquilar'), y de vivienda compartida, como el 'coliving' o el 'cohousing', o de inversión, como la llamada inversión de impacto, suponen "nuevas oportunidades para rebajar la tensión del mercado".
Estas, no obstante, requieren de actualizaciones de las normativas urbanísticas y jurídicas que las amparen.
En cuanto a las oficinas, el informe asegura que las que tendrán un mejor comportamiento serán las bien ubicadas y comunicadas, eficientes y energéticamente sostenibles, donde los empleados quieran acudir porque tengan una buena experiencia de trabajo.
También, que la reducción del espacio de oficinas que necesitarán las empresas a causa del teletrabajo no será proporcional al número de empleados que trabajen a distancia, en parte debido a la tendencia de incremento de superficie de trabajo por empleado combinada con una menor densidad de ocupación, que ahora se ve potenciada por la necesidad de distanciamiento social y por el cambio de modelos en las implantaciones de oficinas.
Será así, en parte también, porque la ratio de ocupación de oficinas incluye, además del puesto físico del trabajador, los espacios complementarios.