Madrid, 14 jul (.).- El consejero delegado de Sociedad de Tasación, Juan Fernández-Aceytuno, ha asegurado que en unos veinte años la generación del 'baby boom' se verá abocada a arrendar una vivienda y ha advertido del impacto que esto tendrá en las pensiones futuras.
"La campana demográfica se ha dado la vuelta y la parte inferior no puede comprar una vivienda, lo que tiene un impacto relevante en las pensiones futuras", ha planteado, por lo que ha llamado a los poderes públicos a "estudiar pensiones y viviendas de forma conjunta, no como decisiones independientes".
En esa línea, ha criticado que "no haya una palabra de vivienda en la ley de pensiones, ni de pensiones en la ley de vivienda".
A su juicio, los actuales niveles de inflación van a complicar aún más el acceso a la vivienda de la población entre 25 y 35 años, lo que también contribuirá a que el arrendamiento gane cuota de mercado hasta porcentajes del 50 % o el 60 %, como en Europa.
"El impacto que nos preocupa es que las pensiones en España no son las de Europa", ha recalcado el CEO, para quien, si España se convierte en una sociedad que alquila mayoritariamente, el problema será que los pensionistas no pueden pagar el alquiler, "y eso habría que mirarlo a veinte o treinta años, y es la llamada que hacemos", ha incidido.
En su análisis del mercado residencial, Fernández-Aceytuno ha señalado que el comprador de vivienda nueva hoy es esencialmente inversor, ya sea un particular en reposición o un fondo para destinarla a alquiler.
Ha puesto como ejemplo una tasación reciente en 11 millones de euros de un suelo en Madrid encargada por un fondo de inversión, que finalmente ha pagado 15 millones "por las expectativas que ven de que van a poner eso en alquiler y que a 45 o 50 años los números les saldrán".
"Hay gente que está dispuesta a jugar a 20, 30 o 40 años, fondos que juegan a largo plazo y que ven una racionalidad en ese mercado", ha afirmado Fernández-Aceytuno, tras constatar que para esos inversores "el producto del 'build to rent' (construir para alquilar) es un producto ganador".
"La generación del 'baby boom' de los años 60 y 70 nos vamos a ver probablemente abocados a utilizar este producto en los próximos 15 o 20 años, porque muchas casas no están adaptadas a las necesidades de espacio, costes de mantenimiento, accesibilidad y localización", ha argumentado.
Además, este experto prevé que el incremento de precio de la vivienda este año "alimente el apetito de los inversores, porque creen que el alquiler va a crecer y precisamente el alto precio genera una mayor demanda de alquiler".
Si bien la mayor parte de analistas y agentes de la propiedad inmobiliaria pronostican que la demanda de vivienda se moderará en la segunda mitad del año, Fernández-Aceytuno no ha descartado que finalmente no sea así y ha apuntado que hasta el momento Sociedad de Tasación no ha notado ningún descenso en la demanda de tasaciones ligadas a las hipotecas.
En su opinión, los inversores van a seguir apostando por el inmobiliario, donde es relativamente fácil obtener una rentabilidad al nivel de la inflación anual, que en la actualidad se sitúa en torno al 10 %.