Madrid, 16 nov (.).- La bolsa española se ha visto agitada por dos opas en los últimos días a pesar de que el mercado de renta variable cotiza al alza y que los elevados tipos de interés pueden complicar las condiciones de financiación, aunque algunos analistas observan posibles oportunidades en el mercado.
La Bolsa española no está en general barata, de hecho su principal selectivo, el IBEX 35, cotiza cerca de máximos anuales -este jueves ha cerrado a 27,3 puntos del máximo anual del pasado 27 de julio- y acumula un repunte del 17,48 % en lo que va de 2023, pero pueden existir oportunidades en el mercado para algunos movimientos.
Sergio Ávila, analista de IG, señala que "el mercado de opas se está reanimando" algo que considera que tiene el sentido porque "hay compañías que están cotizando por debajo de su valor teórico intrínseco".
Ávila apunta que, además de Prosegur (BME:PSG) o Talgo (BME:TLGO) -protagonistas de los dos últimos movimientos-, hay firmas como Ence (BME:ENC) o Ebro Foods (BME:EBRO) en el mercado continúo; así como Indra (BME:IDR), Viscofan (BME:VIS), FCC (BME:FCC) o Mapfre (BME:MAP), que cotizan "muy baratas" en estos momentos.
El miércoles, la dueña de Prosegur con cerca del 60 % del capital, Helena Revoredo, lanzó una oferta pública de adquisición de cciones (opa) sobre el 15 % de la compañía a un precio de 1,83 euros por acción, lo que eleva a 149 millones la operación; la oferta supone una prima del 27,4 % sobre el precio al que cerraron la víspera las acciones.
Mientras que este jueves Talgo confirmó que ha recibido una manifestación preliminar de interés para formular una opa por parte de un grupo empresarial húngaro a 5 euros por acción; de confirmarse la operación, esta superaría los 600 millones de euros y conllevaría una prima del 27,7 %.
Los tipos elevados complican el escenario
Por su parte, Joaquín Robles, analista de XTB, considera que no existe una tendencia general del mercado de que vayan a producirse más opas y considera que estos dos movimientos son casos puntuales que han coincidido en el tiempo, pero que cada uno se debe a una casuística diferente.
Robles señala para explicar por qué no ve esta tendencia que por un lado, la bolsa está en máximos anuales a lo que se suma el contexto de elevados tipos de interés, que pueden encarecer las condiciones de financiación de este tipo de operaciones.
El Banco Central Europeo (BCE) mantuvo en su última reunión los tipos de interés en el 4,5 % después de haberlos subido de forma ininterrumpida en diez ocasiones desde julio de 2022.
En Estados Unidos, la Reserva Federal (Fed) mantuvo los tipos permanecen en la horquilla del 5,25 % y el 5,5 %, lo que supone su máximo nivel desde 2001.
Estos tipos elevados han llevado a que las rentabilidades de la renta fija -tanto de países como de empresas- se eleve, por lo que si los posibles interesados tuvieran que realizar alguna emisión de deuda para financiar la operación el entorno no es el más propicio.