Madrid, 4 feb (.).- El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha pedido este jueves una mayor responsabilidad tanto de clientes como de las entidades financieras y los poderes públicos para fomentar un "consumo responsable" y evitar un endeudamiento excesivo de la población.
Durante su intervención en un acto que formaba parte del Concurso de Comunicación Audiovisual sobre Educación Financiera, Hernández de Cos ha defendido un consumo responsable por parte de los clientes bancarios, lo que exige una "autoevaluación" de los recursos de los que cada uno dispone y de la capacidad de endeudamiento.
Se trata de evitar un sobreendeudamiento excesivo y a ello pueden ayudar las propias entidades financieras, a las que hay que exigir una actuación responsable, lo que implica evaluar adecuadamente la solvencia del potencial cliente antes de concederle financiación, ha explicado el gobernador.
Además, los poderes públicos, en particular los supervisores, entre ellos el Banco de España, deben promover esa responsabilidad y supervisar su cumplimiento como un elemento fundamental para garantizar la estabilidad del sistema financiero.
Sin descartar, ha añadido, la posibilidad de actuar en el caso de que se considere necesario.
En este sentido, ha recordado que el Banco de España ha abierto esta misma semana un proceso de consulta pública para desarrollar determinados aspectos de las herramientas macroprudenciales que la legislación ha puesto a disposición de la institución.
De acuerdo con esta legislación, el Banco de España podrá establecer límites y condiciones a la concesión de préstamos y otras operaciones de las entidades financieras, así como límites a la concentración sectorial, ha subrayado Hernández de Cos.
El gobernador del Banco de España también ha abogado por fomentar las capacidades digitales de la sociedad tras el incremento de la contratación de bienes y de servicios, también financieros, a través de canales digitales.
Esta tendencia, ha vaticinado, probablemente continuará en el futuro, por lo que considera necesario acompañar los esfuerzos en educación financiera con esfuerzos en capacitación digital.
De lo contrario, ha advertido, se podrían generar "bolsas de exclusión financiera", por ejemplo, entre los mayores, o se podrían añadir a los riesgos derivados de una contratación financiera no informada los resultantes del uso de un canal digital desconocido.