París, 17 feb (EFE).- La operadora de telecomunicaciones Orange (PARIS:ORAN) anunció hoy que en 2014 obtuvo un beneficio de 1.225 millones de euros, lo que le supuso una caída interanual del 42,6 %, que el grupo atribuyó al impacto de elementos no ligados a los resultados de su actividad.
En ese periodo, su resultado de explotación se situó en 4.571 millones, un 14,3 % menos, mientras que la facturación se cerró en 39.445 millones, un 3,7 % menos.
La mayor parte de su cifra de negocios, con un total de 19.304 millones (-3,6 %), se localizó en Francia, seguida por los 3.876 millones (-4,4 %) facturados en España, los 2.918 (-5,2 %) en Polonia y los 7.374 (-5,4 %) del resto del mundo.
En su negocio de empresas la facturación cayó un 3,3 %, hasta los 6.299 millones, señaló la compañía en un comunicado, en el que apuntó que hasta el pasado 31 de diciembre tenía 185,3 millones de clientes en la telefonía móvil, un alza del 6,5 % en un año.
El nivel de rentabilidad de la empresa se mantuvo estable, a la vista de que el resultado bruto de explotación (ebitda), de 12.190 millones de euros (-3,6 %), representó un 30,9 % de la facturación, el mismo porcentaje que en 2013.
Para el presidente director general del grupo, Stéphane Richard, aunque la presión de la competencia se ha mantenido muy fuerte en 2014 en todos sus mercados, los resultados comerciales han sido "excelentes" y se han ajustado a los objetivos financieros.
En su opinión, entre otros hechos destacables, la adquisición de Jazztel en España va a permitir crear el segundo mayor operador del mercado en el país y "uno de los actores más dinámicos del mercado de telefonía móvil en un mercado que evoluciona masivamente hacia la convergencia fijo-móvil".
Para 2015, el grupo avanzó que espera un ebitda de entre 11.900 y 12.100 millones de euros, y apuntó que va a proseguir una política "selectiva" que se concentra en los mercados en los que ya están presentes.