Madrid, 19 feb (.).- La banca confía en que el fin de las subidas de los tipos en Europa y la posibilidad de que este año se produzcan algunas bajadas contribuirá a que la demanda de financiación se reanime, sin embargo, los expertos de Funcas consideran que la recuperación del crédito llevará más tiempo.
El director de Estudios Financieros de Funcas, Santiago Carbó, ha explicado a EFE que se espera que los tipos de interés de la zona del euro comiencen a bajar este año, pero aun así se prevé que se mantengan en niveles "altos" en comparación con el pasado reciente, previsiblemente por encima del 3 %.
Esto le hace pensar que la recuperación del crédito no llegará en 2024, a pesar de que reconoce que la situación económica en España será de menor atonía que en el resto de Europa, lo que podría contribuir a que algunas empresas se animen a aumentar su inversión.
En el lado del ahorro, Carbó cree que la banca española tardó en entrar a remunerar los depósitos por su exceso de liquidez, pero una vez que lo ha hecho, piensa que la competencia hará que la rentabilidad se mantenga y no baje de forma inmediata en cuanto lleguen los recortes de tipos.
Durante la presentación de la revista Papeles de Economía Española sobre "El regreso de los tipos de interés y sus efectos", Carbó señaló que las subidas de tipos tienen un efecto directo en la expansión de los márgenes de interés, ya que los bancos ajustan más rápidamente las tasas de los préstamos que las de los depósitos.
Es decir, la financiación se encarece más que lo que aumenta la remuneración del ahorro.
Sin embargo, este "beneficio" se equilibra con un aumento en los riesgos crediticios, ya que los tipos más altos pueden empeorar la calidad de los nuevos préstamos y aumentar la probabilidad de impagos, por lo que cree que el impacto es "mixto".
A pesar de ello, la salud financiera del sector bancario español es "robusta" y ha habido un aumento en la rentabilidad de los recursos propios y en las ratios de capital, al tiempo que los bancos han mantenido niveles de liquidez superiores a los requerimientos regulatorios y los resultados han evolucionado positivamente.
En la misma presentación, el presidente de la Autoridad Bancaria Europea, José Manuel Campa Fernández, señaló que aunque los tipos de interés han mejorado la rentabilidad bancaria, también revelan riesgos como el aumento del coste de financiación y un posible deterioro de la calidad crediticia en sectores altamente endeudados.
Aun así, los últimos test de estrés aseguraron que la banca europea estaba suficientemente capitalizada para apoyar la economía en un escenario adverso de inflación persistente, tasas de interés crecientes y una recesión grave.
Además, Campa sostiene que en el escenario de aumento de tipos, los beneficios adicionales ayudarían a la banca a compensar las pérdidas crediticias, si bien, a pesar de estas fortalezas, pide no caer en la complacencia y seguir fortaleciendo la solvencia y confianza del sector.
Sobre este último punto, considera que la era digital trae nuevos desafíos para mantener la confianza en el sector, con la rápida difusión de información y facilidades para transferencias monetarias.
En el futuro, Campa ve menos beneficios para los bancos, ya que espera un aumento del coste de financiación y también de los costes operativos y un mayor deterioro crediticio, aunque dependerá de la evolución de la economía y de los propios tipos.
Ante este escenario, pide "precaución" y recomienda a la banca prepararse para el cambio de ciclo y los retos tecnológicos y de sostenibilidad.