Dublín, 31 ene (.).- El líder del probritánico Partido Democrático Unionista (DUP), Jeffrey Donaldson, celebró este miércoles que "la frontera" entre Gran Bretaña (Escocia, Gales e Inglaterra) e Irlanda del Norte para las mercancías que se mueven por el Reino Unido "ha desaparecido".
"No habrá controles, ni controles físicos ni controles de identidad, sobre las mercancías que se trasladen desde Gran Bretaña a Irlanda del Norte y que permanezcan dentro del Reino Unido. Los únicos controles que se llevarán a cabo serán los de las mercancías que entren en la Unión Europea o puedan trasladarse a la Unión Europea", expuso Donaldson.
El dirigente unionista efectuó esas declaraciones después de que el Gobierno de Londres publicó hoy el pacto logrado con el DUP para reformar los arreglos comerciales posbrexit para Irlanda del Norte, contenidos en el llamado Acuerdo Marco de Windsor.
Según Donaldson, el DUP -segunda fuerza- está ahora dispuesto a formar después de casi dos años de bloqueo un Gobierno de poder compartido con el nacionalista Sinn Féin -primera fuerza-, toda vez también que el nuevo texto, dijo, garantiza y protege la posición constitucional de Irlanda del Norte en el Reino Unido.
Entre los cambios que incluye el nuevo acuerdo se contempla que la llamada Ley de Retirada será enmendada, con lo que cualquier nueva legislación de la Unión Europea (UE) no se aplicará necesariamente de manera automática en Irlanda del Norte.
Para ello, la Asamblea norirlandesa podrá recurrir a un mecanismo -ya contemplado en Windsor y ahora reforzado-, el llamado "freno de Stormont", por el que la Asamblea autónoma puede bloquear la aplicación de nuevas leyes comunitarias en la provincia.
Donaldson aseguró hoy que la próxima Asamblea podrá poner a prueba este instrumento en el primer mes desde su formación, ya que hay cambios previstos respecto a leyes comunitarias "a la vuelta de la esquina".
"La Asamblea tendrá la oportunidad de analizarlo y echar el freno y decir no si creemos que la regulación de la Unión Europea perjudica nuestra capacidad para comerciar con el resto del Reino Unido", expuso el líder del DUP.
Ese primer paso, prosiguió, abre un proceso en el que el Gobierno de Londres tendrá la última palabra para vetar la aplicación de una ley comunitaria que considere "dañina" para Irlanda del Norte.
Los unionistas abandonaron el Gobierno de Belfast en febrero de 2022 por su rechazo al Protocolo del Brexit para Irlanda del Norte, que imponía controles fronterizos entre Gran Bretaña y la provincia a fin de evitar una frontera física en la isla de Irlanda, tal y como establecen los acuerdos de paz de 1998.
Asimismo, vetaron más tarde el Acuerdo Marco de Windsor, que sustituyó al protocolo e introdujo cambios, pero mantiene a la provincia dentro del mercado único comunitario para bienes y también en el mercado interno británico, lo que pone en riesgo, según el DUP, su relación con el resto del Reino Unido, más aún cuando los nacionalistas avanzan hacia la reunificación de Irlanda.