Investing.com – Un mercado bursátil animado en enero puede llevar a algunos inversores a contar con un gran año.
Esto es por el llamado “efecto enero”, que dicta que la evolución del mercado durante este mes determina su desempeño para todo el año.
Aunque esto ha sido cierto a lo largo del último siglo, el comportamiento del mercado en los últimos diez años arroja ciertas dudas sobre esta “herramienta” de predicción de Wall Street.
Desde 2009, la evolución del mercado ha sido dispar en el primer mes del año y esto es durante la segunda mayor racha alcista de la historia.
En 2017, el mercado sí que cerró al alza en enero, aunque solo marginalmente, dando inicio a uno de sus mejores años.
Pero en otros cuatro ejercicios, el mercado perdió terreno en el primer mes del año y aun así tuvo un cómputo anual positivo.
Por ejemplo, enero fue un mes malo en 2009, cuando el mercado inició el rally de la década, pero ese año terminó con un avance del 20%.
Solo una vez en los últimos diez años el mercado ha sido negativo tanto en enero como en el conjunto del ejercicio.
Por tanto, incluso si el mercado revierte su tendencia y cierra este mes a la baja, hay motivos para que los inversores mantengan la esperanza.