Roma, 4 jul (EFE).- El Fondo Monetario Internacional (FMI) considera que siguen siendo "débiles" las perspectivas de crecimiento económico de Italia y que la tasa de desempleo, que en mayo pasado se situó en el 12,2 %, está a un "inaceptable elevado" nivel.
Esta es la principal conclusión del informe que el FMI publicó hoy al término de la misión rutinaria anual que una delegación de la institución ha realizado a Italia para analizar el estado de la economía y las finanzas de la tercera potencia de la zona euro, que cerró 2012 con una contracción de su PIB del 2,4 %.
"Las perspectivas de crecimiento siguen siendo débiles, el desempleo se encuentra en un inaceptable elevado nivel y la confianza del mercado es aún frágil, lo que pone de relieve que la tarea aún está lejos de haberse completado", indica el FMI en el texto.
"El nuevo Gobierno ha comenzado a actuar sobre los pasos ya tomados para afrontar los problemas estructurales de Italia. Acelerar esta coyuntura para las reformas será esencial para poner en marcha el crecimiento y crear trabajo. Europa tendrá también que desempeñar su papel con acciones para abordar la fragmentación financiera y fortalecer aún más la unión monetaria", prosigue.
El Fondo Monetario Internacional reconoce que la economía de Italia da "muestras de estabilización", pero aún quedan problemas, pues la confianza de empresarios y familias, a pesar de que ha remontado, no ha logrado aún que despegue la actividad y el empleo.
Por ello, y porque, a pesar de que se ha reducido la presión sobre la deuda, aún se mantienen unas condiciones financieras "restrictivas", el FMI prevé que el PIB retroceda un 1,8 % este año para avanzar un ligero 0,7 % el año que viene, frente a las previsiones de -1,3 y +1,3 %, respectivamente, que formuló el anterior Gobierno italiano, presidido por Mario Monti.
El informe advierte además sobre posibles "aplazamientos" en distintas políticas y reformas a nivel nacional, pero también comunitario, que podrían perjudicar la confianza en los mercados en su deuda soberana, intensificando las presiones sobre los bancos y restringiendo el crédito.
"Las perspectivas de crecimiento de Italia a medio plazo se fortalecerán solo con la implementación de reformas globales. La crisis de la zona euro ha afectado de un modo duro a Italia, pero las semillas del anterior débil crecimiento italiano y su estancada productividad dificultan el entorno de negocio y han sobreapalancado el sector público", afirma el FMI.
"Acelerar las reformas para abordar estas debilidades estructurales será crucial para limitar los riesgos de un desempleo a largo plazo, especialmente para los jóvenes", prosigue.
El FMI pide a Italia más esfuerzos para impulsar la productividad de la economía y la cada vez menor competitividad, como fomentar la competencia en el sector de la electricidad, designar reguladores en los transportes, privatizaciones, especialmente a nivel local, así como reformas judiciales o una revisión del gasto público.
"Para apoyar el empleo, se debería dar prioridad a mejorar la coordinación y eficiencia de políticas activas para el mercado laboral y servicios de empleo a nivel local, que apoyarían al programa de garantía para el empleo juvenil que comenzará el año que viene", indica el informe, que apuesta por el contrato único que adquiera más derechos con la antigüedad.
El FMI reconoce que el saneamiento de las cuentas públicas de los últimos años, que llevó a Italia a salir del procedimiento por déficit excesivo de la Unión Europea el pasado 29 de mayo, ha sido "crucial" para ganar en credibilidad y confianza, pero ahora toca "reequilibrar" esos ajustes para fomentar el crecimiento económico. EFE