Río de Janeiro, 25 jun (EFE).- El Gobierno brasileño se propuso como meta terminar 2016 con una inflación del 4,5 %, con lo que mantuvo el mismo objetivo que viene persiguiendo desde 2005, informaron hoy fuentes oficiales.
La meta para el índice de precios en 2016 fue aprobada este martes por el Consejo Monetario Nacional (CMN), organismo del que forman parte los ministerios de Hacienda y Planificación, así como el Banco Central.
Según el CMN, la meta aprobada acepta un margen de tolerancia de dos puntos porcentuales hacia arriba o hacia abajo, por lo que la inflación puede llegar a un máximo del 6,5 %.
En caso de que no cumpla la meta, que el Gobierno siempre fija con dos años de anticipación, el Banco Central tendrá que explicar en carta pública los motivos de su fracaso.
Pese a que la meta para la inflación este y el próximo año también es del 4,5 %, los analistas consultados la semana pasada por la autoridad monetaria proyectaban que el índice se ubicará en el 6,46 % en 2014 y desacelerará hasta el 6,08 % en 2015.
Ello significa que los economistas esperan para este año una inflación muy próxima al límite máximo tolerado por el Gobierno (6,50 %).
Brasil cerró 2013 con una inflación del 5,91 %, ligeramente superior al 5,84 % medido en 2012.