Roma, 24 ene (.).- La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, aseguró hoy que su Gobierno desea que se vuelvan a producir un millón de coches al año en Italia, y advirtió a las empresas de que "quien deslocalice será penalizado", durante una intervención en el Cámara de Diputados.
"Queremos volver a producir un millón de vehículos al año con aquellos que realmente quieren invertir en la excelencia histórica italiana. Si se quiere vender un coche en el mercado internacional anunciándolo como una joya italiana entonces ese coche tiene que ser producido en Italia, esa es la cuestión que tenemos que plantear", dijo.
Meloni citó en particular al "grupo Fiat y las marcas italianas asociadas", actualmente integradas en el grupo internacional Stellantis con sede en Países Bajos, y que "representan una parte muy importante de la historia industrial nacional, en términos de empleo y de riqueza producida".
Ese patrimonio "merece la mayor atención, y esto significa también tener el valor de criticar algunas opciones de la dirección y del grupo cuando han estado alejadas del interés italiano, como he tenido que hacer, a menudo entre la indiferencia general", añadió la líder ultradrechista.
"Creo que hay que tener el valor de criticar algunas decisiones tomadas por la propiedad y la dirección de" Fiat, continuó Meloni, al recordar que el grupo movió la sede fiscal "fuera de las fronteras nacionales" y realizó una operación "de supuesta fusión" que "en realidad ocultaba una adquisición francesa del histórico grupo italiano".
Tanto es así que "hoy en día en el CDA de Stellantis se sienta un representante del Gobierno francés y no es casualidad que las opciones industriales del grupo tengan mucho más en cuenta las instancias francesas que las italianas".
"El resultado es que en Francia se produce más que en Italia, donde hemos pasado de más de un millón de coches producidos en 2017 a menos de 700.000 en 2022", reveló, antes de asegurar que Italia quiere volver a esas cifras.
Y "quien deslocalice será penalizado por el Gobierno", anunció Meloni, al explicar que "los deslocalizadores tendrán que devolver cualquier beneficio o concesión pública recibida en los últimos 10 años".
En una reciente entrevista televisiva, la primera ministra aseguró que no aceptaba la "acusación" de poner "Italia en venta" de quienes "tomaron Fiat y la vendieron a los franceses", al referirse a las privatizaciones que su Gobierno tiene en mente llevar a cabo.
La jefa de Gobierno confirmó que sus previsiones incluyen la obtención de 20.000 millones en tres años gracias a las privatizaciones, "un trabajo serio que se puede hacer" sin por ello "comprometer el control público" de las empresas italianas.
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