París, 17 oct (EFE).- El Gobierno francés y los principales bancos del país buscan soluciones para permitir que la filial financiera de PSA Peugeot Citroen, Banque PSA Finance, penalizada en su acceso al mercado de capitales por la situación del grupo automovilístico, pueda seguir funcionando normalmente.
La información la revela hoy el diario Le Figaro, que indica que el Ministerio de Finanzas y el Tesoro dirigen las negociaciones con BNP Paribas, Crédit Agricole, Natixis y Société Générale, y que podrían concretarse en una solución "en los próximos días".
Un portavoz de PSA señaló a Efe que la dirección del fabricante de automóviles estudia "diferentes opciones" para "mantener un nivel de financiación suficiente" de su filial bancaria, Banque PSA Finance (BPF).
El portavoz no detalló cuáles son esas opciones ni los actores implicados, y se limitó a precisar que por el momento "no están decididos ni los principios ni las modalidades".
No obstante, quiso dejar claro que la estructura de financiación de sus clientes tiene un alto nivel de solvencia (un 13 % del core tier 1) y "de rentabilidad", puesto que el pasado año aportó 532 millones de euros de resultado operativo, y en los primeros seis meses de este ejercicio 271 millones.
Según Le Figaro, el plan de salvamento organizado por el Gobierno francés se basa en tres mecanismos, uno por el que los bancos acreedores aplazarían los reembolsos de la filial financiera de PSA por el equivalente de 4.000 millones de euros de deudas.
Los otros dos serían el compromiso de aportar nuevos créditos (se habla de 1.500 millones de euros) y una garantía estatal para nuevos empréstitos por un monto de 4.000 millones de euros.
Los riesgos que pesan sobre la estructura financiera tienen que ver con la reciente rebaja de la nota de las agencias de calificación al grupo PSA, que si se trasladara a BPF le provocaría dificultades para atraer capitales en el mercado a un costo asumible.
Una cuestión de mucha importancia para el fabricante francés, ya que el pasado año la filial bancaria financió 843.800 vehículos de los 3.549.000 vendidos por las dos marcas, Peugeot y Citroen. EFE