MADRID (Reuters) - El Ibex-35 de la bolsa española aprovechó la publicación de unos resultados deslucidos y la corrección de otros mercados europeos para tomar beneficios tras haber subido casi un cuatro por ciento en el mes de enero cerrado esta semana.
La caída de Wall Street tras unos sólidos datos de empleo que apuntan a nuevas subidas de tipos y con ocasión de unos débiles resultados de algunos valores clave contribuyó al descenso del Ibex hasta el punto de llegar a probar la zona de los 10.200 puntos.
Caixabank (MC:CABK) y Sabadell (MC:SABE), que acumulan alzas de más del 10 por ciento desde el inicio del año, lideraban los descensos de un sector bancario que retrocedía en toda Europa.
Caixabank perdió casi un tres por ciento tras publicar a primera hora unas cuentas por debajo de las previsiones en el cuarto trimestre, pese a que su beneficio neto subió un 61 por ciento en 2017 gracias a la integración de BPI (LS:BBPI).
Por su parte, Sabadell se dejó un 3,2 por ciento tras anunciar también el viernes un aumento de su beneficio neto apoyado en un crecimiento de las comisiones y en la reducción de sus activos problemáticos.
Los pesos pesados Santander (MC:SAN) y BBVA (MC:BBVA) apoyaron la tendencia con caídas próximas al 1,5 por ciento.
Entre los valores no financieros de alta ponderación, el blue chip Inditex (MC:ITX) se dejó más de un dos por ciento mientras que Telefónica (MC:TEF) y Repsol (MC:REP) perdieron un 1,7 por ciento en cada caso.
Sin excepción alcista alguna entre sus componentes, 15 de los 35 valores del Ibex perdieron más de un dos por ciento en la sesión.
"Ha habido una toma de beneficios indiscriminada para corregir las recientes subidas", dijo un operador. "El Ibex, que en días previos parecía resistir la zona de los 10.400 puntos, ha llegado a probar el soporte de los 10.200".
El índice terminó con un descenso de 188 puntos, un 1,8 por ciento hasta 10.2437 puntos mientras que el paneuropeo Eurofirst 300 se dejó un 1,4 por ciento.