MADRID (Reuters) - Tras los dos tímidos repuntes de las sesiones anteriores, el Ibex-35 cerró con pérdidas el miércoles, en una sesión de alta volatilidad en la que se vio arrastrado durante la tarde por la tendencia negativa en Wall Street.
Tras el fin de la temporada de resultados, la atención de los inversores se encuentra en los datos macroeconómicos de las grandes potencias mundiales para determinar el rumbo futuro de las políticas de los grandes bancos centrales, especialmente tras la victoria de Donald Trump en las elecciones estadounidenses.
La expectativa de que su administración traiga un incremento del gasto y menores impuestos, y con ello un aumento global de la inflación, seguía provocando ventas en el mercado de bonos, elevando las rentabilidades y aumentando al mismo tiempo el atractivo del dólar, que tocaba máximos de 14 años frente a una cesta de las principales divisas.
"El mercado (español) ha estado algo huérfano de referencias y al final el descenso en Wall Street ha empujado a la baja", dijo un operador en Madrid.
El índice estadounidense Dow Jones caía el miércoles tras cerrar en la víspera con una séptima subida consecutiva después de la victoria de Trump.
Con este telón de fondo, el Ibex-35 se dejó un 0,56 por ciento, a 8.638,5 puntos, tras moverse entre los 8.563 y los 8753 puntos. El índice paneuropeo FTSEurofirst 300 cedió un 0,14 por ciento.
En positivo destacaron Cellnex (MC:CLNX), con un alza del 2,4 por ciento tras ser uno de los valores más castigados en lo que va de año (-23,7 por ciento).
Las caídas más fuertes estuvieron en la banca, con descensos de más del 2 por ciento en Caixabank (MC:CABK), Popular y Sabadell (MC:SABE), tras registrar movimientos mejores que el selectivo en los últimos cinco días de cotización.
Entre los pesos pesados, Santander (MC:SAN) se dejó un 1 por ciento y BBVA (MC:BBVA) un 0,5 por ciento, Inditex (MC:ITX) cayó un 0,7 por ciento y Telefónica (MC:TEF) cayó un 0,2 por ciento.