2 mar (Reuters) - El principal índice bursátil español abrió el miércoles con volatilidad y dudas, lastrado por un sistema bancario que está sufriendo a nivel europeo las consecuencias del conflicto en Ucrania, mientras los bancos centrales se ven forzados a adaptar sus estrategias a los efectos que la guerra tendrá en la economía.
La invasión de Ucrania por parte de Rusia hace casi una semana ha cambiado el panorama para los inversores, que se decantan por los valores seguros y se alejan de los activos de riesgo.
Al mismo tiempo, aumentan las dudas sobre la retirada de los estímulos pandémicos debido a los riesgos para la actividad y el consumo por la guerra y el repunte del petróleo, aunque los dirigentes monetarios se enfrentan a un dilema a la hora de decidir sus próximos pasos debido a la elevada inflación.
En un contexto de gran volatilidad, los bancos de la zona euro han bajado un 25% desde sus máximos del 10 de febrero, mientras las sanciones contra Rusia siguen sacudiendo los mercados financieros.
Algunos analistas matizan el riesgo que supone la exposición a Rusia para el sector bancario. Kallum Pickering, economista de Berenberg, afirma: "En general, las empresas más expuestas son relativamente pequeñas".
Pickering también añade que se espera que los reguladores gestionen la presión sobre el sector: "Esto podría incluir la satisfacción de cualquier aumento de la demanda de reservas, permitiendo a los bancos distribuir las pérdidas a lo largo de varios años, y proporcionando cierto margen de maniobra para las entidades que están obligadas a aumentar el capital".
Los mercados estarán atentos el miércoles a la publicación de la inflación de febrero en la eurozona, mientras que en EEUU se esperan los datos de empleo privado ADP de febrero y el Libro Beige de la Fed.
Renta 4 (MC:RTA4) señalaba en su nota de análisis diario: "Lo más relevante podría ser la comparecencia del presidente Powell ante el Congreso (16 h), donde lo más probable es que haga una aproximación prudente a la subida de tipos en un contexto de muy elevada inflación pero también con riesgos a la baja sobre el crecimiento económico global".
Así las cosas, a las 08:34 GMT del miércoles, el selectivo bursátil español Ibex-35 caía un 0,03%, hasta 8.185,9 puntos, tras ceder en la víspera más de un 3%, su mayor caída en más de tres meses.
Mientras, el índice de grandes valores europeos FTSE Eurofirst 300 retrocedía un 0,44%.
En cabeza del índice se situaban valores refugio como el grupo de hemoderivados Grifols (MC:GRLS), que ganaba un 2,4%.
La petrolera Repsol (MC:REP) se alzaba un 1,3%, favorecida por el aumento de los precios del petróleo, ante los obstáculos en los envíos de crudo derivados de las sanciones impuestas a Rusia.
El conjunto del sector bancario sufría especialmente con la situación geopolítica. Santander (MC:SAN) perdía un 1,41%, BBVA (MC:BBVA) retrocedía un 1,26%, Caixabank (MC:CABK) cedía un 1,81%, Sabadell (MC:SABE) caía un 1,47%, y Bankinter (MC:BKT) se dejaba un 1,15%.
Entre los grandes valores no financieros, Telefónica (MC:TEF) retrocedía un 0,42%, Inditex (MC:ITX) cedía un 0,66%, Iberdrola (MC:IBE) se revalorizaba un 0,29%, Cellnex (MC:CLNX) ganaba un 0,88% y la petrolera Repsol subía un 1,28%.
(Información de Flora Gómez; información adicional de Julien Ponthus; editado por Tomás Cobos)