MADRID (Reuters) - El Ibex-35 cerró el jueves en un nuevo mínimo en lo que va de año por segunda sesión consecutiva, mientras la preocupación para la tensión comercial entre EEUU y China mantiene a los inversores alejados de activos de riesgo como las bolsas.
El jueves vence el periodo de consultas públicas de la propuesta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de gravar importaciones de bienes chinos por valor de 200.000 millones de dólares, lo que podría abrir la puerta a una rápida imposición de más aranceles en la guerra comercial entre las dos mayores economías del mundo.
Los inversores también están pendientes de las actuales conversaciones entre Argentina y el FMI tras una reciente sacudida del peso que afectó a los valores españoles con más exposición al país.
En este contexto, el Ibex-35 bajó un 1,0 por ciento hasta los 9.208,7 puntos, un nivel mínimo desde mediados de diciembre de 2016, mientras que el índice de grandes valores europeos FTSE Eurofirst 300 se dejó un 0,41 por ciento.
El banco BBVA (MC:BBVA) estuvo entre las mayores caídas, con un descenso del 2,5 por ciento, después de que la entidad dijera que subió su estimación de provisiones por su exposición a Turquía debido al empeoramiento de la situación macroeconómica del país.
El resto de bancos también bajó. Santander (MC:SAN) se dejó un 1 por ciento, mientras que entre los bancos medianos Caixabank (MC:CABK), Bankia (MC:BKIA) y Sabadell (MC:SABE) retrocedieron entre un 1,17 por ciento y un 1,9 por ciento.
El gestor aeroportuario Aena (MC:AENA) cayó con fuerza, un dos por ciento, tras el inicio de cobertura del bróker Morgan Stanley (NYSE:MS) con la recomendación de "infraponderar".
Entre los valores de más ponderación, Telefónica (MC:TEF), que cotiza en niveles de 2002, cayó un 0,86 por ciento, mientras Inditex (MC:ITX) cayó un 0,27 por ciento e Iberdrola (MC:IBE) bajó un 0,66 por ciento.
Fuera del selectivo, las acciones de FCC (MC:FCC) sumaron un 0,9 por ciento, tras conocerse el jueves que la empresa, en consorcio con otras dos, ganó un contrato de 1.500 millones de dólares para ampliar el aeropuerto en Lima.
(Información de Rodrigo de Miguel, editado por Emma Pinedo)