MADRID (Reuters) - El Ibex-35 cerró el martes con leve baja por toma de beneficios por segundo día consecutivo, en línea con otros mercados, mientras el mercado ya está a la expectativa de conocer el resultado de la reunión del Banco Central Europeo (BCE) el jueves.
"Hemos visto un día de consolidación después de las fuertes subidas de las últimas semanas y a la espera de la reunión del Banco Central Europeo el jueves. Es normal que se produzca una toma de beneficios", dijo Nicolás López, director de análisis MG Valores.
Los mercados financieros esperan que el BCE recorte su tipo de depósito al menos 10 puntos básicos y amplíe su programa de compra de activos esta semana, pero son cautelosos después de que el BCE defraudara sus expectativas en diciembre.
Un mal dato comercial de China, donde las exportaciones cayeron más de lo previsto en febrero, y un nuevo ajuste a la baja del precio del petróleo alejaron además a los inversores de activos de riesgo como la renta variable.
En este contexto, el Ibex-35 perdió un 0,53 por ciento a 8.740,3 puntos, mientras que el paneuropeo FTSEurofirst 300 cedió un 0,90 por ciento a 1.329,25 puntos.
La prima de riesgo española se relajaba ligeramente hacia el entorno de los 139 puntos básicos, mientras España lanzó una emisión de deuda sindicada a 30 años y después de que el Tesoro subastara 5.571 millones de euros en deuda a corto plazo, levemente por encima de su objetivo, con unos tipos de interés en territorio negativo.
En el selectivo español, Arcelor Mittal (MC:MTS) encabezó las pérdidas, con un descenso del 7,5 por ciento tras las subidas de los días previos y después de la bajada del precio de los metales.
Valores vinculados al petróleo como Técnicas Reunidas (MC:TRE) o Repsol (MC:REP) también estuvieron entre los más castigados de la jornada, con descensos del 4 y 2,8 por ciento, respectivamente.
El precio del barril de crudo caía después de que Kuwait dijera que accedería a congelar su producción de petróleo si los principales productores participan en el pacto y después de que Goldman Sachs (NYSE:GS) arrojara un cubo de agua fría sobre las perspectivas de un repunte sostenido del mercado.
La constructora OHL (MC:OHL) registró un descenso del 3,5 por ciento, tras una rebaja de su rating por parte de Moody's debido la caída de los beneficios de su división de ingeniería y construcción en 2015 y a unas limitadas previsiones de recuperación en 2016.
Además, la cadena de distribución DIA (MC:DIDA) y el fabricante de aerogeneradores Gamesa (MC:GAM) se dejaron más de un tres por ciento.
En el preponderante sector bancario, sólo Santander (MC:SAN) logró cerrar al alza, con un avance de casi un 1 por ciento, después de que UBS (SIX:UBSN) recomendara "mantener" el valor.
BBVA (MC:BBVA) perdió un 1,1 por ciento después de que la misma entidad iniciase el martes la cobertura con recomendación de "vender".
El mismo bróker calificó con recomendación de "comprar" las acciones de Sabadell (MC:SABE), que cerró plano.
Entre el puñado de empresas que cerraron en verde, Iberdrola (MC:IBE) sumó un 0,3 por ciento, después de que HSBC cambiara su calificación a "comprar" desde mantener.
Asimismo Telefónica (MC:TEF) cerró con una caída del 0,4 ciento, mientras que Inditex (MC:ITX) bajó un 0,9 por ciento un día antes de presentar resultados.
El fabricante de hemoderivados Grifols (MC:GRLS), que el martes anunció sus inversiones en su negocio de hemoterapia a cinco años, cerró con una caída del 0,1 por ciento.