Madrid, 24 mar (.).- A cierre de 2020 había 3,2 millones de personas en paro que antes tenían empleo, de las que 583.100 habían sido despedidas o su puesto de trabajo suprimido, una cifra que supone casi el doble respecto a las 297.500 de un año antes.
De acuerdo con la variables de submuestra de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicadas por el INE, el 18 % de los parados con experiencia laboral previa en 2020 había dejado de trabajar por despido o supresión del puesto de trabajo, frente al 10,1 % de 2019.
El principal motivo, sin embargo, fue la finalización del contrato, que afectaba al 53,5 % de los parados con experiencia laboral previa que había a cierre de 2020, en línea con el 55,8 % de 2019.
Los parados que dejaron su último empleo hace tres años o más representaban el 18,4 % del total de parados con experiencia laboral, 5,5 puntos menos que en 2019.
En 2020 un total de 305.600 ocupados, de los que 286.100 eran mujeres, trabajaron a tiempo parcial con objeto de disponer de más tiempo para cuidar a personas dependientes, un 7,4 % menos que en 2019.
Las tasas de empleo más elevadas en 2020 fueron para las especialidades de estudios de tecnologías de la información y las comunicaciones (73,91 %) y de ciencias sociales, periodismo y documentación (72,38 %).
La de especialidad de salud y servicios sociales tuvo la tasa de paro más baja (9,12 %).
Por el contrario, las personas que con la enseñanza secundaria obligatoria o el bachillerato presentaron las tasas de paro más elevadas (20,19 %) y las de empleo más bajas (35,89 %).
El 13,7 % de los ocupados trabajaron en 2020 en empresas de más de 250 trabajadores, frente al 12,5 % de 2019, mientras que en las empresas de hasta 10 trabajadores el porcentaje fue del 37,9 %, frente al 39,4 % del año anterior.