Roma, 28 dic (.).- La Cámara de los Diputados de Italia se reúne hoy con el objetivo de aprobar definitivamente los Presupuestos Generales para 2022, los primeros del Gobierno de Mario Draghi, a solo cuatro días de que acabe el plazo de fin de año.
El texto, ya aprobado en primera lectura en el Senado, llegó este martes a la Comisión Presupuestaria de la Cámara de los Diputados y se espera que esta tarde pase al pleno para ser debatida y votada por los diputados y obtener su aprobación definitiva.
La sesión ha sido convocada a las 14.00 hora local (13.00 GMT) y la votación no se espera antes de las 18.00 hora local, y ni siquiera se excluye que se pueda extender a mañana.
Esto a cuatro días del 31 de diciembre, cuando, de no aprobar las cuentas, da comienzo el conocido como "ejercicio provisional", una medida excepcional que permite únicamente operaciones económicas ordinarias hasta que se aprueben los Presupuestos, más adelante.
No obstante el "sí" a la ley presupuestaria se da por descontado puesto que el Gobierno de Mario Draghi está apoyado por todos los partidos del hemiciclo, excepto por los ultraderechistas Hermanos de Italia y por unos pocos parlamentarios de Izquierda Italiana (SI).
Por eso es posible que el Gobierno someta el Presupuesto a una "moción de confianza", una estrategia frecuente en Italia con la que se busca acelerar la aprobación de las leyes porque evita el debate parlamentario y la imposición de enmiendas.
Las cuentas valen en torno a 32.000 millones de euros e incluyen medidas para afrontar la crisis de la pandemia y también para acotar el aumento de los precios de la energía, como fondos para permitir el pago de facturas a plazos.
También, entre otras disposiciones, contempla un nuevo cómputo para las pensiones, a la espera de una reforma estructural del sistema. Se trata de la llamada "Cuota 100", que permitirá la jubilación a los trabajadores de 64 años que hayan cotizado 38.
El pasado 16 de diciembre el sindicato italiano CGIL, el mayor del país, convocó una huelga nacional, la primera del Gobierno Draghi, para protestar contra los presupuestos, que calificaron de "insatisfactorios".