El Royal Bank of Canada (RBC) (NYSE:RY) ha presentado unos sólidos resultados del cuarto trimestre fiscal, en el que sus ingresos por banca corporativa y de inversión alcanzaron un máximo de casi dos años. Los buenos resultados de la división de mercados de capitales, cuyos ingresos netos aumentaron un 36%, contribuyeron de forma significativa a los buenos resultados del banco. Un notable ajuste de los impuestos diferidos reforzó aún más las ganancias del RBC, añadiendo 578 millones de dólares y elevando el beneficio por acción (BPA) ajustado a 2,78 dólares. Esta cifra superó la estimación media de los analistas de 2,62 dólares.
A pesar de los beneficios positivos, RBC tuvo que hacer frente a unas provisiones para pérdidas crediticias mayores de lo previsto, que ascendieron a 720 millones de dólares. Por su parte, City National Bank, filial de RBC en Estados Unidos, registró una pérdida neta ajustada de 89 millones de dólares tras una importante aportación de capital de casi 3.000 millones de dólares por parte de RBC en el último año.
Además de las noticias sobre sus resultados, RBC está actualmente a la espera de la aprobación final de la ministra de Finanzas de Canadá, Chrystia Freeland, para su posible expansión mediante la adquisición de HSBC Canada. La operación propuesta, por valor de 13.500 millones de dólares, ya ha superado los obstáculos antimonopolio, pero se enfrenta a cierta oposición.
El buen trimestre de RBC se produce en un momento en que el sector financiero se enfrenta al impacto de las subidas de tipos del Banco de Canadá en las finanzas de los consumidores. No obstante, las divisiones de capital y mercados globales del banco han demostrado su resistencia, contribuyendo a la fortaleza de los beneficios de RBC.
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