MADRID (Reuters) - La patronal de las constructoras españolas, Seopan, dijo que tras casi una década de contracción que redujo la actividad en casi un 80 por ciento, el sector de la construcción ha tocado suelo el año pasado y afronta los próximos dos años con más optimismo gracias al repunte de la inversión pública.
En 2017, la actividad nacional de las constructoras asociadas a Seopan subió un 0,3 por ciento a 4.296 millones de euros.
"Parece que hemos tocado suelo en 2017, es el mejor dato de los últimos años", dijo Julián Núñez, presidente de la patronal en la presentación del informe 2017, aunque advirtió que esta mejora aún no se ha notado en el empleo en la construcción, que bajó en 2017 en un 7,2 por ciento, equivalente a la supresión de 18.199 puestos de trabajo.
Así, el repunte registrado en 2017 se debió exclusivamente a la recuperación de la edificación residencial mientras que la obra civil se contrajo otro 2 por ciento.
No obstante, para 2018 Seopan espera una subida de la contratación y licitación de obra civil y edificación del sector público de entre el 15 y el 30 por ciento.
Y también para 2019 las previsiones son optimistas gracias en parte a los 5.000 millones de euros del plan público-privado de inversión en carreteras aprobado el año pasado.
MANTENER MODELO DE PEAJE
Ante el próximo vencimiento de varias concesiones de autopistas de peaje, Seopan se mostró partidario de la relicitar estas concesiones para ahorrar al Estado unos gastos de gestión de 450 millones de euros al año.
A finales de noviembre de 2018 expirará la concesión de la autopista de peaje AP-1 entre Burgos y Armiñón. Núñez dijo que sin peaje el tráfico en este tramo crecería en un 30 por ciento hasta unos 27.000 coches diarios, casi la mitad de los cuales serían transporte pesado.
"Habría que adecuar las calzadas al tráfico y construir un tercer carril para este tramo lo que supondría en gasto adicional para las arcas públicas de unos 320 millones de euros", dijo Núñez.