Pamplona, 14 feb (.).- El sindicato LAB ha rechazado los argumentos de la dirección de Volkswagen (ETR:VOWG_p) Navarra para solicitar un ERTE en 2024 al entender que la menor carga de trabajo anunciada el cese de producción del modelo Polo se debe a una decisión "únicamente empresarial" de dejar de producirlo, no por un problema de ventas.
Por ello, en una nota LAB entiende que las consecuencias de esta decisión "deben ser asumidas únicamente por la empresa, no por los trabajadores que nada tienen que ver en ella, no es un problema de calidad, ni de productividad, es una decisión de la multinacional", incide en una nota.
Sobre otro de los motivos de la empresa para justificar el ERTE, el de la adaptación de las instalaciones al proceso de electrificación de los vehículos, el sindicato advierte de que el cambio tecnológico y de renovación de instalaciones es "intrínseco al negocio desarrollado. No es el primero que afrontamos, pero sí es el primero que VW Navarra quiere sufragar a costa de sus trabajadores, de sus prestaciones de paro".
También replica a la alegación de la dirección sobre la posible falta de piezas por inestabilidad social para solicitar un ERTE, y entiende que esgrimir posibles cortes de carretera producidos por agricultores o transportistas, o posibles huelgas de transportistas, es "hacer responsable económicamente a la plantilla de tales situaciones".
Así, LAB argumenta que la plantilla pierde cada día de cierre entre un 20 % y un 30 % de su salario, ya que los pluses "no se ven reflejados cuando la empresa públicamente habla de complementar la prestación por desempleo hasta el 100 % del sueldo y antigüedad".
También advierte de que la posible falta de piezas es "únicamente producto de la deslocalización" de los proveedores, una política empresarial "contraria totalmente a la parte social" que reporta una serie de beneficios económicos que llevan asociados la necesidad de asumir grandes riesgos por la falta de suministros, ya sea por motivos laborales, climáticos, sociales, políticos o sanitarios.
"Los costes de está praxis empresarial los debe asumir en su totalidad la empresa, no los trabajadores que nada tienen que ver con esta política de suministros", subrayan.