Madrid, 26 ene (.).- El tráfico de mercancías por los puertos de interés general cerró 2023 con un descenso del 3,3 % en comparación con un año antes, hasta más de 543 millones de toneladas, ha informado este viernes el Ministerio de Transportes.
La mercancía general se contrajo un 2,9 % el año pasado en tasa interanual, hasta 262,6 millones de toneladas. El Ministerio lo justifica por el descenso de la mercancía que se transporta en contenedor (4,7 % menos).
La capacidad de carga medida en TEU también descendió en 2023 con respecto a las cifras de 2022, un 4,5 % hasta más de 16 millones.
Tanto el transporte marítimo de los graneles sólidos como los líquidos cayeron en 2023, un 3,7 % en ambos casos, en tanto que el volumen de mercancía general convencional aumentó el 1,2 %, hasta 83,9 millones empujado por el buen comportamiento de los vehículos (19,6 % más, 3,8 millones de unidades).
En cuanto al tráfico ro-ro, creció el 1,3 % hasta los 71,8 millones de toneladas y el número de buques mercantes por los puertos españoles aumentó en 2023 el 4,5 %, con un total de 164.215 unidades.
La mejor noticia en los puertos provino en 2023 del tráfico de pasajeros, con un ascenso del 18,9 % en comparación con 2022 (39,2 millones de personas) y por encima del récord de movimiento de cruceristas marcado en 2019 (10,6 millones), con más de 12 millones (un 46,8 % más respecto a 2022).
En este último apartado destacó el liderazgo continuado en 2023 de Barcelona y Baleares en este sector, pero con aumentos en casi todos los puertos, con un fuerte impulso de Cádiz (72,4 % más) y los puertos canarios.
Transportes señala en una nota que el año pasado ha estado marcado por una desaceleración en los tráficos, por diversas tensiones internacionales, como la guerra de Rusia y Ucrania, a la que se sumó la situación de violencia en Oriente Medio.
Este último conflicto, añade, se ha provocado especialmente en la última parte del año y provocó repercusiones en el comercio marítimo al verse afectado el paso del mar Rojo que provoca cambios de rutas, retrasos y también subida de costes.
Para 2024 las previsiones oficiales auguran también esas tensiones globales.