Madrid, 20 feb (.).- El consejero delegado de Enagás (BME:ENAG), Arturo Gonzalo Aizpiri, ha recordado que hasta ahora ningún país miembro ha utilizado la posibilidad de prohibir las importaciones de gas natural licuado (GNL) ruso unilateralmente, y cree que se debe a que hay una visión compartida en el Consejo de la UE de que la decisión debe ser comunitaria.
Gonzalo Aizpiri ha señalado este martes, en la rueda de prensa en la que ha presentado los resultados de la compañía en 2023, que Enagás no decide de donde viene el GNL que llega a España porque ni compra ni vende gas, aunque preferiría que no viniera de Rusia, si bien entiende las posiciones de todos los estados miembros de la UE.
En cuanto a las previsiones de demanda de gas en 2024, después del descenso en 2023, ha indicado que estará muy próxima a la del año pasado.
No obstante, ha recordado la notable recuperación del consumo industrial en el segundo semestre de 2023, cuando fue del 22 %, tendencia que se mantiene en 2024 aunque no con el mismo porcentaje.
Gonzalo Aizpiri opina que esta subida del consumo industrial puede compensar la reducción del doméstico o del consumo para generación de electricidad, que sufrió una fuerte caída en 2023 dado su excepcional incremento en 2022, en que marcó máximos desde 2010.
Respecto al impacto del descenso de los precios del gas y de la demanda, el consejero delegado ha dicho que, aunque es verdad que ha disminuido el consumo por un invierno de temperaturas suaves y por estar los almacenamientos llenos, han surgido nuevas necesidades.
En este sentido, ha recordado que en Europa se han puesto en marcha siete plantas de regasificación flotantes, sobre todo en Alemania e Italia, y por su forma de operación, al no contar con almacenes para el gas como las terminales en tierra, necesitan adquirir capacidad de almacenamiento en tanques de plantas de regasificación como las de España.
Niveles máximos de contratación en las infraestructuras
Ha explicado que por eso la caída de los precios y de la demanda no está ocasionando una pérdida de utilización de las infraestructuras de Enagás, donde los niveles de contratación son máximos, de acuerdo a lo que permite la normativa, hasta el año 2038.
Preguntado por el hundimiento de activos por la progresiva sustitución del gas por hidrógeno, ha comentado que en los gasoductos se intentará maximizar los activos que puedan reacondicionarse para el transporte de hidrógeno, al igual que los almacenes.
En el caso de las plantas de regasificación, ha explicado que la idea es convertirlas en plantas multimolécula y también se pueden utilizar sus tanques para manejar amoniaco.
Respecto a la nueva Dirección General de Ingeniería, Tecnología y Digitalización que ha creado Enagás, el consejero delegado ha anunciado que su titular será Susana de Pablo, hasta ahora directora general del Gestor Técnico del Sistema Gasista (GTS), a quien reemplazará María Junco, hasta ahora directora de Operación del Sistema.
Por otro lado, Enagás ha aprobado una recompra de acciones propias por el plan de retribución flexible de entrega de títulos a empleados y directivos de la empresa y sociedades del grupo, en el que la compañía podrá adquirir un máximo de 430.000 acciones por un importe máximo de 6,2 millones de euros.