Madrid, 10 may (.).- Endesa (BME:ELE) está analizando de modo indirecto, a través de la Empresa Nacional del Uranio S.A. (Enusa), los efectos sobre los pedidos de suministro de combustible nuclear procedentes de Rusia a partir de 2024, al tiempo que ha señalado que Enusa está derivando las órdenes de fabricación a otros proveedores.
La eléctrica, que ha presentado este jueves los resultados del primer trimestre, dedica un apartado de su informe de gestión al conflicto Rusia-Ucrania.
Endesa indica que no tiene contrapartes eventualmente afectadas por las sanciones a Rusia por invadir Ucrania, ni tiene formalizados contratos de suministro de gas con Rusia, de manera que su suministro de gas está asegurado.
No obstante, en el caso del uranio, utilizado por las centrales nucleares, la compañía señala que "de modo indirecto, a través de la Empresa Nacional del Uranio, S.A. (Enusa), está analizando los efectos sobre los pedidos de suministro de combustible nuclear procedentes de Rusia a partir de 2024, si bien dicha sociedad está derivando las órdenes de fabricación a otros proveedores".
Según datos de la Empresa Nacional de Uranio (Enusa) correspondientes a 2020, España importó ese año un 38,7 % de uranio de Rusia, un 22,3 %, de Canadá, un 19,5 % de Níger, un 11 % de Kazajistán, un 3,7 % de Namibia, un 2,5 % de Uzbekistán y un 2,3 % de Australia.