Por Rodrigo De Miguel
MADRID (Reuters) - El grupo español de piscinas y tratamiento de agua Fluidra (MC:FLUI), que ha acordado fusionarse con la estadounidense Zodiac en una compleja operación para convertirse en un gigante global del sector, se prepara para años de desapalancamiento de la deuda adquirida tras la operación, dijo el martes su presidente.
"El primer objetivo será desapalancar", dijo Eloi Planes en una entrevista con Reuters.
Fluidra anunció una fusión transfronteriza con la combinación de sus negocios con Zodiac, creando un gigante con una facturación combinada de casi 1.300 millones de euros y un ebitda de 210 millones, en una operación que calculan producirá 35 millones de euros de sinergias.
"La compañía será una compañía de muchísimo más tamaño y esto hace que sea más visible, y tiene una parte de ingresos más ligada al mercado americano", añadió Planes, cuya empresa pasará a facturar tras la operación alrededor de un 30 por ciento en el mercado americano frente al 5 por ciento actual.
"La lógica es la complementariedad de las dos compañías", dijo.
Sin embargo, la deuda de unos 560 millones de euros de Zodiac - que supone un ratio deuda neta/ebitda de más de 5 veces- frente a los 192 millones de Fluidra (1,9 veces), implica que el nuevo grupo deberá realizar un esfuerzo para controlar su apalancamiento hasta un objetivo de entre 2 y 2,5 veces para 2020, frente a las 3,6 veces con las que nacerá.
De cara al futuro, Planes abrió la puerta a que el nuevo grupo pueda mejorar la retribución al accionista a medio plazo, siempre que se cumpla la senda de desapalancamiento.
"¿Esta compañía tendrá capacidad de pagar mejores dividendos una vez integrada y con el apalancamiento en su sitio?, claro que sí", dijo.
El director financiero, Xavier Tintoré, dijo que Fluidra tiene como objetivo refinanciar la deuda conjunta de Fluidra y Zodiac entre enero y febrero, antes del cierre de la fusión previsto para el primer semestre del año que viene, con un vencimiento a seis años.
El presidente de Fluidra dijo que el objetivo es lograr unas mejores condiciones de financiación para la abultada deuda de Zodiac, aprovechando las favorables condiciones del mercado de capitales.
"Vamos a refinanciar con mejores condiciones que las que tiene ahora Zodiac", dijo Planes. "Hay voluntad de aprovechar las condiciones del mercado de financiación porque para la deuda combinada de Fluidra y Zodiac es mejor".
¿COTIZACIÓN EN NUEVA YORK?
La compleja operación de fusión contempla que el principal accionista de Zodiac, el fondo de capital Rhone capital LLC, pase a ser el primer accionista de Fluidra a través de un vehículo que aportará los activos de Zodiac a cambio de un 42,43 por ciento del capital de Fluidra, que se le dará en acciones nuevas tras una ampliación de capital.
Las acciones de Fluidra - que capitaliza ahora en bolsa unos 1.170 millones de euros - se han revalorizado un 23 por ciento a 10,93 euros por acción desde el anuncio el pasado viernes, cerrando el martes en máximos históricos desde que comenzó a cotizar en 2007 a 6,5 euros por acción.
La operación está sujeta a que los reguladores españoles acepten la solicitud de que Rhone se vea exento de lanzar una opa sobrevenida por Fluidra, al sobrepasar el nivel del 30 por ciento de su capital.
Los actuales accionistas de Fluidra, las familias fundadoras del germen del grupo en 1969 que controlan el 50 por ciento del capital, se diluirán hasta el 28 por ciento en la nueva compañía tras la ampliación.
El fondo Rhone y las familias fundadoras han analizado la posibilidad de que Fluidra pueda cotizar en la bolsa de Nueva York en el futuro, aunque Planes dijo que la decisión aún no está tomada.
"Hemos hablado que podría ser interesante en un momento dado cotizar en Nueva York. Cuando llegue el día lo analizaremos y veremos. Es una opción que tiene que madurar, no es una decisión tomada", dijo.
Fluidra, que seguirá cotizando en España y mantendrá su sede en la localidad catalana de Sabadell (MC:SABE) pese a la fuga de empresas de la región tras el ímpetu independentista, dijo que la crisis catalana no retrasó la negociación del acuerdo de fusión.
"La operación ha llevado su tiempo, evidentemente hemos hablado de la situación, pero no la ha dilatado ni nada", dijo Planes.