MADRID, 7 jun (Reuters) - Las largas colas que se han producido en el aeropuerto de Madrid Barajas en las últimas semanas deberían aliviarse a medida que la policía española trabaja en la contratación de más personal para hacer frente al aumento del turismo por la relajación de las restricciones del COVID-19, dijo el martes el Gobierno.
La policía española contratará a 200 funcionarios más para controlar el flujo de turistas en el aeropuerto de Madrid-Barajas este verano, dijo el martes la ministra portavoz del Gobierno español, Isabel Rodríguez.
Con las nuevas contrataciones, un total de más de 600 agentes trabajarán en el aeropuerto para controlar el flujo de turistas extranjeros que ha aumentado notablemente en las últimas semanas, provocando retrasos y quejas de los turistas, dijo a los periodistas durante una conferencia de prensa tras la reunión semanal del gabinete.
Las largas colas en Madrid son similares a los problemas en los aeropuertos de Reino Unido, Ámsterdam y otros lugares de Europa debido a la reanudación de los viajes a medida que la pandemia disminuye.
La unidad española de International Airlines Group (LON:ICAG) se quejó el lunes de los retrasos y el caos en el control de pasaportes del aeropuerto de Barajas de Madrid y dijo que unos 15.000 de sus pasajeros perdieron su vuelo desde el 1 de marzo.
El Ministerio del Interior español negó que nadie hubiera perdido un vuelo en el aeropuerto, operado por Aena (BME:AENA) SME
"Reiteramos que no se están produciendo colas o retrasos que vayan más allá de situaciones puntuales generadas por la coincidencia de varios vuelos procedentes desde fuera del espacio Schengen", señala el comunicado.
Las personas procedentes del espacio Schengen, un grupo de 26 países europeos entre los que se encuentra España, pueden viajar libremente sin necesidad de presentar el pasaporte.
Según el Ministerio del Interior, unos 18,7 millones de viajeros transitarán por el aeropuerto de Madrid en junio de este año.
(Información de Christina Thykjaer; editado en español por Benjamín Mejías Valencia y José Muñoz en la redacción de Gdansk)