Bruselas, 15 may (EFE).- El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, dijo hoy que España ve "excesivo" dedicar el 30 % de las ayudas agrícolas a los productores que hagan esfuerzos medioambientales y señaló que "queda mucho camino por recorrer", pese al avance en las negociaciones de la reforma agraria.
El ministro valoró las nuevas propuestas sobre el llamado "pago verde" presentadas hoy por la Comisión Europea en un Consejo de Agricultura, pero indicó que aunque incluyen "alguna flexibilización", siguen sin satisfacer a países como España.
"Sólo incluye avances tímidos, todavía muy pequeños, por lo que todavía queda mucho camino por recorrer y habrá que seguir negociando", dijo Arias Cañete en una rueda de prensa al término del Consejo.
España considera que la actividad agraria ya tiene de por sí "un enorme valor medioambiental, por lo que exige que las nuevas reglas "verdes" incluidas en la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) sean "sencillas, se adapten a la realidad productiva comunitaria, no impliquen mayores cargas administrativas a los Estados miembros y no hagan inviable la gestión agrónoma".
En su intervención en el debate del Consejo, el ministro indicó que España es contraria a condicionar el 30 % de los pagos directos de los agricultores y ganaderos al "greening" o nuevas exigencias medioambientales, ya que considera "excesivo" el porcentaje.
Según el ministro, otros ocho Estados miembros defienden esa misma posición.
España considera, por otro lado, que "no es realista desde un punto de vista agronómico" imponer una limitación de tres cultivos para todas las explotaciones de más de tres hectáreas, como quiere la Comisión y propone en cambio un tope de dos cultivos "y siempre que las explotaciones tuvieran una dimensión superior a las 15 o 20 hectáreas", explicó.
Las particularidades agrícolas nacionales "no hacen fácil que en una finca de menos de tres hectáreas se puedan articular tres cultivos diferentes, por términos de rentabilidad", señaló.
En total, hay una mayoría de 21 países que se opone en las nuevas reglas sobre diversificación de cultivos y limitación de superficies, afirmó el ministro.
La CE ha hecho una propuesta "tímida" en la que estaría dispuesta a considerar una superficie a definir entre las 3 y las 10 hectáreas, lo que "ya está más cerca de las peticiones españolas, que se sitúan en 15 hectáreas y aspirando a casi 20", explicó.
La modificación también propone eximir de la exigencia de diversificación a las explotaciones de menos de 50 hectáreas que tengan una parte significativa de pastos y barbecho, lo que "sí cumple las expectativas de España" para este tipo de tierras.
España también defiende que entre las explotaciones que se pueden beneficiar directamente de porcentaje de pago "verde" se incluyan la dehesa mediterránea, los pastos permanentes, los cultivos permanentes, el arroz, las leguminosas, las explotaciones incluidas en Natura 2000 y las superficies acogidas a medidas agroambientales.
Sobre la idea de la CE de destinar el 7 % de la superficie a actividades de interés ecológico, España pide una reducción al 3 % y que se consideren de esta forma cultivos como los barbechos, las leguminosas o los cultivos permanentes.
Por último, España solicita que las penalizaciones por incumplimiento del "pago verde" sólo afecten a este tipo de ayudas, pero no repercutan sobre el resto de las subvenciones de la PAC, una propuesta de la que la CE "no es muy partidaria". EFE
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