Shanghái (China), 28 ago (.).- El endeudado gigante inmobiliario chino Evergrande (HK:3333) anunció hoy que pospondrá hasta finales de septiembre las votaciones de sus acreedores sobre el plan propuesto por la compañía para reestructurar parte de su deuda extraterritorial ('offshore').
En un comunicado remitido a la Bolsa de Hong Kong -donde cotiza-, la compañía indica que las votaciones sobre las tres ramas del plan quedan pospuestas hasta los días 25 y 26 de septiembre.
La compañía justificó su decisión en la "escala y la complejidad" del plan, la reanudación de su cotización en Hong Kong tras casi año y medio congelada y la "interpretación errónea en numerosas informaciones de prensa" sobre la solicitud de quiebra que presentó recientemente en Estados Unidos.
Originalmente, los acreedores 'offshore' de Evergrande estaban llamados a votar el 23 y el 24 de agosto; de haber obtenido su aprobación, la compañía tendría que haber solicitado los permisos necesarios para llevar a cabo el plan en una nueva vista judicial en Hong Kong a principios de septiembre.
Evergrande, que acumulaba una deuda 'offshore' de casi 20.000 millones de dólares (18.500 millones de euros) e incurrió en el impago de sus bonos a finales de 2021, también tiene abiertos procesos similares ante la Justicia de las Islas Vírgenes Británicas y las Islas Caimán.
En Hong Kong, la defensa de Evergrande aseguró en julio que las últimas estimaciones apuntan a una tasa de recuperación de activos del 22,5 % en caso de liquidación, una cifra muy superior al 3,4 % anunciado en noviembre de 2022.
Con este plan, Evergrande propone varias opciones a los tenedores de bonos respaldados, como nuevos títulos de deuda de idéntico valor y vencimientos de entre 10 y 12 años o una posible combinación de "instrumentos vinculados al capital" convertibles en acciones de sus filiales de gestión inmobiliaria o vehículos eléctricos y nuevos bonos, en este caso de entre 5 y 9 años.
Por su parte, los tenedores de bonos no respaldados recibirán, según el plan, varios tramos de bonos con vencimiento de hasta ocho años por una cantidad total de unos 7.300 millones de dólares.
La compañía retomó hoy su cotización en Hong Kong, suspendida desde marzo de 2022, con caídas de casi un 87 % a la apertura; sus acciones ya habían perdido más de un 90 % de su valor entre su pico máximo, en octubre de 2017, y la última jornada antes de congelarlas.
En la noche del domingo, la otrora mayor promotora de China anunció pérdidas del equivalente a unos 4.191 millones de euros en el primer semestre, lo que se suma a otros casi 74.000 millones de euros entre 2021 y 2022.
Al cierre de junio, el conglomerado acumulaba un pasivo total de 2,39 billones de yuanes (327.599 millones de dólares, 303.159 millones de euros).
La posición financiera de muchas inmobiliarias chinas empeoró después de que, en agosto de 2020, Pekín anunciase restricciones al acceso a financiación bancaria a las promotoras que, como Evergrande, habían acumulado un alto nivel de deuda apoyando durante años su crecimiento en agresivas políticas de apalancamiento.
En los últimos meses, ante la crisis en el sector, el Gobierno ha cambiado su tono y ha anunciado diversas medidas de apoyo, con los bancos estatales abriendo asimismo líneas de crédito multimillonarias a diversas promotoras.
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