Madrid, 17 feb (.).- El presidente de la patronal de concesionarios de vehículos Faconauto, Gerardo Pérez, ha asegurado hoy que para que el sector del automóvil salga de la situación "crítica" en la que se encuentra son necesarios un plan Renove gestionado por las redes comerciales y en el que la ayuda a la compra sea de 1.000 euros, así como una nueva fiscalidad.
Durante el discurso inaugural del XXX Congreso de Faconauto, que se celebra hasta mañana, Pérez ha añadido que otras "medidas urgentes" son agilizar la campaña de vacunación de la población ante la covid-19, llegar al objetivo de cero emisiones de los vehículos apoyándose previamente en los modelos híbridos y un plan de achatarramiento no vinculado a la adquisición de un vehículo.
Del proceso de vacunación ha dicho que "nos va mucho en ello y es la manera de recuperar cuanto antes la normalidad y la movilidad, esta última muy vinculada a nuestra actividad”.
En cuanto a los híbridos ha indicado que son “una estación intermedia donde muchos clientes se pueden sentir cómodos y provocar la aceleración hacia la movilidad descarbonizada”.
Sobre este punto ha valorado que el Gobierno -representado hoy por la ministra de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto- estudie aprobar un nuevo Moves para la compra de vehículos eléctricos con una dotación de "800 millones de euros", que, para Gerardo Pérez, acercará estos vehículos "a todos los bolsillos”.
Por lo que respecta a un nuevo Plan Renove, lo que plantea Faconauto son "dos cambios sustanciales": que la cuantía de la ayuda se amplíe a 1.000 euros para los automóviles modernos de gasolina y diésel; y que sean los concesionarios los que tramiten los expedientes, "siempre y cuando se negocie asegurar la liquidez de la red durante el proceso".
Faconauto ha calculado que, con estos "sencillos cambios“, se podrían generar 100.000 ventas adicionales este año con un plan que es "fundamental" para incentivar un mercado "raquítico" en enero que solo puede traer desempleo
En paralelo, el presidente de Faconauto ha propuesto al Gobierno que apruebe -para renovar el antiguo parque automovilístico español- un plan de achatarramiento no vinculado a la adquisición de un vehículo que suponga un estímulo al propietario.
Finalmente, Gerardo Pérez ha insistido en la necesidad de revisar la fiscalidad, que conlleve una menor imposición a la compra y una nueva tasa "urgente que penalice la antigüedad del vehículo".
“Ligar la fiscalidad al uso es necesario para rejuvenecer nuestro parque”, ha precisado, al tiempo que ha reiterado la importancia de eliminar el IVA para los eléctricos para la democratización de las bajas emisiones.
Gerardo Pérez ha pedido el apoyo del Gobierno a estas propuestas, lo que implica la materialización de los 3.750 millones de euros que comprometió vinculados al Plan de Impulso de la Cadena de Valor de la Industria de la Automoción.
“Nos jugamos mucho -le ha dicho a Reyes Maroto- y vuestro apoyo será decisivo para que la transformación que vamos a abordar no repercuta en el empleo, en un sector que representa al 9 % de la población activa”, ha advertido.