Madrid, 13 may (.).- Las ferias españolas tuvieron que cancelar el 63 % de los eventos programados en 2020 por culpa de la pandemia, lo que provocó que tuvieran casi siete veces menos visitantes que un año antes, según los datos de la Asociación de Ferias Españolas (AFE).
En un comunicado difundido este jueves por la AFE se cifra en casi 1,4 millones el número de visitantes totales en 2020 con un total de 100 ferias celebradas, frente a los 9,7 millones de visitantes y 424 eventos de 2019.
Además, este año han participado 11.700 expositores directos en las ferias organizadas por los 28 miembros de la AFE, cuando en 2019 se superaron los 49.800.
En 2020, pese a que solo se pudieron celebrar un 37 % de los eventos programados, el 23 % se realizaron de manera presencial y el 14 % a través de formatos híbridos o digitales.
Además, el 54 % de los eventos fueron de carácter profesional, mientras que un 38 % se destinaron al público en general y el 8 % restante tuvo una fórmula mixta.
Según la asociación, la pandemia ha puesto en valor los encuentros presenciales como palanca económica para la recuperación, lo que permite prever una un mejor comportamiento durante los próximos meses.
"Las ferias son grandes aliadas de las empresas y el hecho de que puedan celebrarse de nuevo ayudará, sin duda, a la recuperación de múltiples sectores y de la economía en su conjunto" ha defendido el presidente de AFE, Xabier Basañez.
Sobre las previsiones para 2021 y 2022, la mayoría de los asociados piensa que la recuperación casi total del sector no llegará hasta 2022, pese a que en el segundo semestre del año se espera una reactivación gradual de la actividad.
Así, el 63 % de las ferias en 2021 tendrán un formato exclusivamente presencial, mientras que un 13 % se harán en formato híbrido y un 5 % serán digitales, frente al 19 % de eventos que ya han tenido que ser cancelados.
Para reactivar el sector, las ferias españolas están centradas en aplicar criterios de flexibilidad, apoyo y compromiso con los clientes, gestionar adecuadamente los nuevos modelos de negocio y adaptarlos a las necesidades actuales y garantizar la seguridad sanitaria para generar confianza.
En este sentido, la evolución del proceso de vacunación y la creación de certificados sanitarios permitirán avanzar en determinar un calendario.