(Actualiza la EC3119 con más datos del contrato)
Madrid, 7 jul (.).- Ferrovial (MC:FER) se ha adjudicado en un consorcio con Acciona (MC:ANA) el proyecto de soterramiento de la madrileña M-30 a la altura del estadio Vicente Calderón por un importe de 46,4 millones de euros y cuyas obras arrancarán el próximo mes de septiembre.
El contrato, promovido por el Ayuntamiento de Madrid, tenía un presupuesto base de licitación de 69 millones, por lo que la adjudicación al consorcio integrado por Ferrovial y Acciona conlleva una baja del 33 %, según han indicado fuentes del consistorio.
Las obras, con una duración prevista de 20 meses, se llevarán a cabo manteniendo en todo momento la circulación en la M-30 en ambos sentidos a través de un desvío provisional construido bajo la demolición del estadio, según ha explicado Ferrovial.
Solo las zonas de cubierta próximas a las actuales bocas del túnel deberán realizarse montando las vigas en horario nocturno con cortes puntuales de tráfico, tal y como ha explicado el Ayuntamiento.
Los trabajos, que finalizarán en 2023, tienen como objetivo dar continuidad al trazado en túnel de la Calle 30 dado que este tramo es el único del arco sur que quedó en superficie ya que discurría por debajo de la tribuna oeste del que fuera el estadio del Atlético de Madrid.
Este proyecto ampliará además la extensión de "Madrid Río" al eliminar este tramo en superficie, que supone una barrera para la movilidad en la zona, y mejorará la seguridad de la movilidad en la M-30.
Los trabajos comprenden la construcción de un falso túnel de 620 metros de longitud con una anchura variable de entre 26 metros en la embocadura sur y algo más de 21 metros en la embocadura norte.
Asimismo, la nueva infraestructura contará con las instalaciones y servicios necesarios para su funcionamiento e integración con los tramos aledaños de la Calle 30.
Su cubierta permitirá además la plantación de arbustos y árboles para la creación de una nueva zona verde superior que se enlazará con el parque de "Madrid Río".
Ferrovial ya participó en los trabajos de soterramiento de la Calle 30, en concreto en el proyecto del "bypass sur", en el túnel norte y en el soterramiento del tramo entre el puente de Segovia y el puente de San Isidro.