Brasilia, 5 dic (EFE).- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, anunció hoy que el Gobierno prorrogará hasta finales de 2013 el Programa de Sustentación de Inversiones (PSI) como un estímulo para la industria, que según la mandataria todavía no se ha beneficiado de todas las medidas implementadas para fomentar el crecimiento.
"Varias medidas que tomamos en 2012 todavía no han surtido el efectos completo, pero tenemos la seguridad de que se van a extender en el sistema económico", señaló Rousseff en el discurso de apertura del Séptimo Encuentro Nacional de la Industria, celebrado en Brasilia.
Los detalles de las condiciones para ampliar el programa de inversiones hasta 2013, de acuerdo con Rousseff, serán anunciados entre hoy y mañana por el ministro de Hacienda, Guido Mantega.
Por trece meses consecutivos, la producción industrial brasileña pasó por un período de contracción que fue interrumpido en octubre pasado, cuando se registró un avance del 2,3 por ciento frente al mismo mes de 2011 y del 0,9 por ciento respecto a septiembre de este año.
Según la mandataria, para el desarrollo del país "una industria competitiva es una cuestión central" y citó que para alcanzar ese objetivo el Banco Central redujo la tasa de interés hasta el 7,25 por ciento anual, "un nivel sin precedentes" en el país.
"Es verdad que tuvimos un desempeño bastante precario de la industria, pero también es verdad que ella se está recuperando", afirmó Rousseff ante 1.500 empresarios y líderes sindicales reunidos en la capital brasileña.
La presidenta consideró la reducción de la tasa básica de interés y la depreciación del real frente al dólar como factores "favorables" para el sector industrial.
"Hoy tenemos un 'mix' (mezcla) de cambio e intereses mucho más favorable al desarrollo productivo", señaló la jefa de Estado, quien también destacó la ampliación de recursos para la educación hecha por su Gobierno y el empeño para reducir el costo de las tarifas de energía como aspectos "fundamentales" para incentivar la producción industrial.
"Todo lo que coloquemos en la educación es inversión para el momento presente y ahorro para el Gobierno futuro", subrayó Rousseff, quien vetó el pasado viernes uno de los artículos de la nueva ley de reparto de regalías petroleras para garantizar los contratos ya firmados y destinar más recursos al sector educativo.
Durante el encuentro, la Confederación Nacional de la Industria (CNI) entregó a Rousseff un documento con 101 medidas propuestas para la "modernización laboral", entre las que aparece un pedido para facilitar la entrada al país de profesionales extranjeros calificados debido a la escasez que hay en el país de mano de obra especializada en algunos sectores. EFE