Isabel Saco
Ginebra, 20 mar (EFE).- Grandes sombras se ciernen sobre la ligera recuperación del sector de transporte aéreo, que este año ve mejoradas sus perspectivas financieras gracias al creciente optimismo en la marcha de los negocios, pero que podrían ser arruinadas por cualquier nueva turbulencia en la economía mundial.
El último episodio que hace temblar a los analistas del sector aéreo es el rescate financiero propuesto por la Unión Europea a Chipre, cuyas duras condiciones han sido rechazadas por el Parlamento y la opinión pública de este país.
"La controversia con respecto a la draconiana propuesta de rescate para las instituciones financieras chipriotas es un claro indicador de que la crisis de la zona del euro no ha terminado y podría tomar un giro peor", advirtió hoy el director general de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), Tony Tyler.
Al presentar las más recientes previsiones financieras para la industria aérea en 2013, Tyler recalcó que "hay riesgos considerables que persisten en el entorno económico y que podrían arruinar su recuperación".
La IATA anunció que el sector experimentará una ligera mejora de su rentabilidad en 2013, que calcula será de 10.600 millones de dólares, frente a los 8.400 millones que estimó hace tres meses.
Esta evolución supone un margen de rentabilidad -después de impuestos- del 1,6 por ciento, un 0,3 por ciento más que el calculado anteriormente.
Tras mencionar estas proyecciones, Tyler recordó que 2011 y 2012 tuvieron "falsos inicios" porque, si bien parecían empezar bajo buenos auspicios -como 2013-, ambos fueron años de una profundización de la crisis europea "y esto podría ocurrir otra vez".
"El impacto de la situación sin resolver de Chipre es un factor de riesgo que no puede ser ignorado", señaló el responsable de la IATA, que representa los intereses de 240 aerolíneas que cuentan por el 84 por ciento del tráfico aéreo global.
Para poner en perspectiva la situación del sector aéreo, el directivo comparó los 10.600 millones de dólares de beneficio neto esperado para 2013 con los 671.000 millones de ingresos totales de las aerolíneas y, más anecdótico aún, con los 11.500 millones de dólares de ganancia "que una sola compañía, Nestlé, obtuvo el año pasado".
En ese contexto, consideró que la característica generalizada del sector del transporte aéreo es su "rentabilidad anémica crónica", sobre todo si se le compara con la de otras industrias de servicios.
Recordó que la aviación comercial es un "catalizador del crecimiento económico y del desarrollo, que sostiene 57 millones de empleos y 2,2 billones en actividades económicas".
Tyler elogió a las aerolíneas que, a pesar del entorno económico y de medidas gubernamentales en mercados claves que les afectan negativamente, están saliendo adelante y siendo rentables a base de eficiencia y de medidas de reestructuración.
En las últimas semanas, la IATA criticó la propuesta de la Unión Europea para reforzar los derechos de los pasajeros que, desde el punto de vista de la industria, "incrementará el coste de volar, pero no aportará beneficios, ni siquiera pequeños o a largo plazo, para los consumidores".
Asimismo, señaló que los recortes forzados del gasto público en Estados Unidos reducirán los presupuestos destinados a la gestión del tráfico aéreo, la seguridad y los controles fronterizos, todo lo cual "puede tener más costes económicos que los beneficios que se buscan".
Finalmente, se recordó que el Reino Unido está por incrementar, a partir del 1 de abril, el impuesto a la aviación que ya es el más alto del mundo.
Para este año se estima que la demanda de transporte de mercancías subirá un 2,7 por ciento -previsión que revierte el declive de los dos últimos años- y la de pasajeros progresará un 5,4 por ciento. EFE