París, 19 jun (EFE).- Ni siquiera un viernes en verde consiguió evitar que la Bolsa de París cayese por cuarta semana consecutiva, arrastrada por los funestos augurios que llegan desde Atenas y Bruselas ante la posibilidad cada vez más real del grexit.
El selectivo índice Cac 40 de la Bolsa parisina registró hoy una subida del 0,25 % al cierre de la sesión, hasta situarse en 4.815,37 puntos, cada vez más lejos de la estratégica frontera de 5.000 puntos, sobre la cual hasta hace no tanto parecía cómodamente instalada.
El fracaso de la reunión de ayer del Eurogrupo sobre Grecia no hizo mella en la compraventa de acciones el viernes, pero está por ver cómo amanece el parqué el lunes, antes de que los jefes de Estado y de Gobierno celebren una nueva cumbre, casi a la desesperada, para evitar el abismo.
Un total de 6.800 millones de euros, jornada activa, se movieron de manos hoy en París, que llegó a alcanzar un tope durante la sesión de 4.870,52 puntos.
En cabeza de las ganancias se ubicó el proveedor del sector automotor Valeo (PARIS:VLOF) (+4,17 %), que lideró la carga de los automóviles, grandes beneficiados de la jornada.
Cerca de él, en segunda posición, se situó Peugeot (+3,32 %), mientras que también fue un buen día para los poseedores de los títulos de su competidor Renault (+1,64 %) y para los neumáticos Michelin (PARIS:MICP) (+1,43 %).
Por abajo, L'Oreal (-1.19 %) y Carrefour (PARIS:CARR) (-0,83 %) cerraron la tabla de una jornada sin grandes dramas.