MADRID (Reuters) - Grifols (MC:GRLS) se desplomó el miércoles en bolsa, después de que UBS (SIX:UBSG) alertara de la competencia que supondría a partir de 2021 la entrada en el mercado de una nueva tecnología para enfermedades autoinmunes que según el bróker podría amenazar el 20 por ciento de las ventas del grupo de hemoderivados catalán.
La tecnología con inhibidores del receptor neonatal del fragmento C (inhibidores de FcRn), actualmente en fase de investigación, quiere convertirse en una alternativa para el tratamiento de algunas enfermedades autoinmunes, que actualmente son tratadas con inmunoglobulina, una de las proteínas plasmáticas estrella de Grifols.
Los ensayos con estos inhibidores están en fase II de investigación y no llegarán al mercado, si son autorizados, al menos hasta 2021, pero UBS estima muy probable su aprobación para algunas enfermedades (miastenia gravis y trombocitopenia inmune).
El grupo de hemoderivados, que llegó a ceder más de un 8 por ciento en algunos compases de la sesión, respondió que discrepaba de las conclusiones planteadas por UBS, alegando que la investigación es muy preliminar, que aún tiene que demostrar su eficacia frente a la inmunoglobulina y que sólo estarían indicados para un pequeño número de enfermedades y pacientes.
"La compañía entiende que el potencial impacto en su negocio sería mínimo", dijo Grifols, cuyo volumen de negociación prácticamente triplicó la media de los últimos 90 días, en un comunicado remitido al regulador.
Grifols cerró con un recorte del 5,4 por ciento a 23,09 euros por acción, siendo el peor valor del selectivo en términos porcentuales. En Estados Unidos, sus títulos caían más del 6 por ciento.
UBS cambió su recomendación de "neutral" a "vender" y redujo su precio objetivo de 25 a 18 euros por acción, convirtiéndose en el bróker más conservador de los que cubren el valor, según datos de Refinitiv Eikon, y desencadenando el mayor descenso diario de Grifols en más de cuatro años.
Otros analistas también se han hecho eco de la potencial amenaza de esta nueva tecnología, aunque creen que el impacto será más limitado y otros alegan que aún existen riesgos de que fracase en el desarrollo de las últimas fases.
(Información de Emma Pinedo; Editado por Jose Elías Rodríguez)