Por Dmitry Madorsky y Maxim Shemetov
KAMENSK-SHAKHTINSKY Rusia (Reuters) - Decenas de vehículos pesados militares rusos se acumulaban el viernes cerca de la frontera con Ucrania, mientras guardias fronterizos ucranianos cruzaban al otro lado para inspeccionar el enorme convoy de ayuda rusa.
Kiev ha dicho que teme que la ayuda humanitaria sea utilizada como una tapadera para una intervención militar rusa, y ha insistido en que sus efectivos comprueben el convoy antes de que entre en su territorio.
Moscú ha negado tener motivos ocultos, y permitió a los guardias fronterizos ucranianos entrar en Rusia e inspeccionar la enorme caravana de camiones aparcada en una zona enfrente de la localidad fronteriza de Izvaryne.
"Guardias fronterizos ucranianos están ahí ya en grandes números", dijo el portavoz del cuerpo Andriy Demchenko. Las Fuerzas Armadas ucranianas dijeron que la inspección comenzó el viernes por la mañana, sin que se supiera cuánto se iba a prolongar.
El jueves, el convoy de unos 280 camiones paró en unos campos abiertos cerca de la localidad rusa de Kamensk-Shakhtinsky, que está a unos 20 km de la frontera en frente de Izvaryne, una localidad ucraniana bajo control de los separatistas prorrusos.
Aparte de los camiones, un periodista de Reuters en el lugar vio una decena de vehículos de transporte blindado de personal (APC, por sus siglas en inglés) no lejos del convoy. Otro periodista de Reuters vio a dos docenas de APC moviéndose cerca de la frontera el jueves por la noche.
The Guardian informó el viernes que su enviado especial había visto varios APC cruzando la frontera con Ucrania. (bit.ly/1pbRpYg)
Preguntado por esta noticia, un portavoz militar ucraniano, Oleksiy Dmytrashkivsky, respondió: "Estos movimientos hacia territorio ucraniano tienen lugar casi todos los días, con el objetivo de provocar (al lado ucraniano). La noche pasada no fue una excepción. Algunos vehículos blindados cruzaron. Estamos comprobando la cantidad y el número de personas que cruzaron".
Kiev y la OTAN dicen temer que Rusia, que sostienen que ha acumulado más de 40.000 soldados cerca de la frontera, invada el este de Ucrania. Rusia afirma que está llevando a cabo maniobras militares y que no tiene planes de invadir a su vecino. Además, niega dar apoyo a los rebeldes en Ucrania con dinero o armas.
Estados Unidos y la Unión Europea han impuesto sanciones a Rusia por su papel en el conflicto en el este de Ucrania y su anexión previa de la península ucraniana de Crimea, en la que se ha convertido en la peor crisis en las relaciones entre Moscú y Occidente desde la Guerra Fría.
ESCASEZ
Las agencias de ayuda humanitaria dicen que los habitantes de Luhansk y Donetsk, donde separatistas prorrusos combaten contra las tropas gubernamentales, sufren escasez de agua, comida y luz después de cuatro meses de conflicto, en el que Naciones Unidas dice que han muerto más de 2.000 personas.
Rusia dice que su convoy lleva 2.000 toneladas de agua, alimentos infantiles y otro tipo de ayuda para los habitantes de la zona, en su mayoría rusohablante, y ha rechazado las acusaciones de Kiev y otros responsables occidentales de que pudiera estar utilizando una tapadera para una infiltración militar.
El Ministerio ruso de Asuntos Exteriores dijo estar en negociaciones intensas con el Gobierno ucraniano y la Cruz Roja, mientras que el ministerio ucraniano dijo que se habían alcanzado varios acuerdos técnicos sobre el procedimiento para inspeccionar el convoy con la supervisión de la Cruz Roja y de la Organización para la Cooperación y la Seguridad en Europa (OSCE).
Kiev culpa a Rusia y a los separatistas de la situación de los civiles, pero ésta ha empeorado con la ofensiva del Ejército ucraniano. El jueves, proyectiles de artillería cayeron cerca del centro de Donetsk por primera vez.