Budapest, 14 dic (.).- El Parlamento húngaro aprobó hoy un aumento del impuesto de ventas minoristas a las grandes cadenas de supermercados, la mayoría extranjeras, a las que se obligará también a entregar los alimentos que caducan en 48 horas, para su reparto social.
La ley aprobada hoy determina que para las cadenas con una facturación de más de 273 millones de euros anuales, la tasa más alta de este impuesto sea del 2,7 %, frente al 2,5 % actual.
Aunque la ley no discrimina entre empresas nacionales y extranjeras, en la práctica afecta sólo a grandes cadenas extranjeras, como Aldi, Auchan, Lidl, Penny Market, Spar y Tesco (LON:TSCO).
La nueva legislación, aprobada con la mayoría del partido gubernamental, el Fidesz, también determina que estas mismas cadenas deberán entregar al Centro de Salvación de Alimento los productos alimentarios que caduquen en las siguientes 48 horas.
La legislación no afecta a las tres cadenas húngaras más grandes, CBA, COOP y Reál, ya que estas funcionan como franquicias, por lo que su facturación es muy inferior al que establece la ley.
EFE