Por Jose Elías Rodríguez y Isla Binnie
MADRID (Reuters) - La eléctrica española Iberdrola (MC:IBE) mantuvo el miércoles sus principales guías financieras para el conjunto del año después un incremento de doble dígito alto en sus cuentas del primer semestre, que reflejaron la consolidación plena de su negocio brasileño, la recuperación de la producción hidroeléctrica, y la fortaleza de sus negocios regulados y renovables.
Su presidente Ignacio Sánchez Galán dijo en la conferencia con analistas que en la segunda mitad del año será aún mejor y contribuirá a alcanzar un resultado operativo bruto (ebitda) superior a los 9.000 millones de euros y un beneficio neto cercano a los 3.000 millones.
En los seis primeros meses de 2018, el ebitda creció un 17 por ciento a 4.436 millones de euros, mientras que el beneficio neto bajó un 7,1 por ciento a 1.410,5 millones por la ausencia de elementos extraordinarios como el dividendo cobrado de Gamesa (MC:GAM) antes de su fusión con el negocio eólico de Siemens.
"Durante el pasado ejercicio se incluyeron 442 millones de euros de partidas extraordinarias positivas después de impuestos correspondientes a la operación Siemens-Gamesa y a la revisión efectuada de los precios de la cartera de contratos de gas en España", precisó la empresa.
En el mercado, las cuentas de Iberdrola propiciaban tomas de beneficio y sus acciones eran el principal lastre del Ibex con un descenso del 1,4 por ciento. La eléctrica, una de las favoritas del sector europeo para los analistas, sube este año un 6 por ciento, frente al 3 por ciento que se deja el selectivo.
NUEVO GOBIERNO OFRECE BUENAS EXPECTATIVAS
Galán dijo que las primeras señales enviadas al sector del nuevo Gobierno socialista hacen pensar en un verdadero cambio tanto en la política como en el enfoque de la transición energética.
"Puedo decir que los primeros comentarios del nuevo gobierno y de la ministra (de Transición Ecológica, Teresa Ribera) están en línea con nuestra visión", dijo el patrón de la eléctrica vasca, añadiendo que la compañía ya ha mantenido varias reuniones con el Ejecutivo de Pedro Sánchez.
"Transmitiendo lo que el Gobierno ha dicho, un plan de 70 por ciento de (generación con) renovables (para cumplir con los objetivos medioambientales europeos a 2030), requeriría inversiones en el país de entre 70.000 y 80.000 millones de euros en nuevas plantas eléctricas y en las redes necesarias para integrarlas", añadió, destacando el potencial impacto positivo en el empleo del país.
Casi la mitad de la electricidad que produce Iberdrola es con fuentes renovables. La compañía ya ha apuntado que quiere ir cerrando sus centrales de carbón y cuestionado la viabilidad económica de las nucleares.
Estas líneas coinciden con la apuesta por las energías verdes del nuevo Gobierno, que además se plantea cerrar el parque nuclear al final de su vida útil.