Madrid, 1 jul (.).- Iberdrola (BME:IBE) ha reducido su capital social en 137,47 millones de euros mediante la amortización de 183.299.000 acciones propias como parte de su política de remuneración al accionista mediante el dividendo flexible, que da la oportunidad de cobrarlo en tìtulos de la compañía o en metálico.
Tras ello, el capital social resultante de la reducción ha quedado fijado en 4.680.000.000 euros, correspondientes a 6.240.000.000 acciones, según ha indicado la eléctrica a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La finalidad de la reducción de capital es la amortización de acciones propias para ayudar a la política de remuneración del accionista, por tanto, no ha entrañado la devolución de aportaciones por ser Iberdrola la titular de las acciones amortizadas.
La reducción de capital se ha realizado con cargo a reservas de libre disposición.
Iberdrola distribuirá entre sus accionistas, como mínimo, 0,348 euros por acción en concepto de dividendo complementario con cargo a los resultados de 2023.
La eléctrica tiene previsto pagar el 29 de julio el dividendo complementario a los accionistas que hayan optado por recibir efectivo mediante esta opción.
Este importe se suma a los 0,202 euros brutos por acción ya abonados el pasado mes de enero como dividendo a cuenta. La retribución total al accionista con cargo a 2023 se sitúa en 0,55 euros brutos por acción, un 10,8 % más que en el año anterior.