MADRID (Reuters) - El grupo estadounidense de energía UIL Holdings, objeto de una propuesta de compra por parte de la española Iberdrola (MADRID:IBE), dijo el miércoles que presentará información adicional ante el regulador del estado de Connecticut después de que este rechazase provisionalmente la operación por no tener claro los beneficios que tendrá para sus clientes.
"Estamos revisando cuidadosamente la decisión provisional (...) y deseosos de facilitar aclaraciones e información adicional a la PURA (siglas inglesas para la Autoridad Regulatoria de Empresas de Servicios Públicos)", dijo el presidente y consejero delegado de UIL, James P. Torgenson, en un comunicado.
El primer ejecutivo del grupo estadounidense -con activos de transmisión y distribución de electricidad y gas en los estados de Connecticut y Massachusetts- dijo que este fallo provisional otorga una oportunidad a la compañía y a Iberdrola para abordar las preocupaciones del regulador.
El supervisor energético de Connecticut anunció la víspera que el proyecto de cambio de control en UIL Holdings no daba información específica y mensurable sobre el interés público de la transacción.
Según los documentos colgados en la página web de la PURA, la oficina del consumidor del estado (OCC) ha propuesto a las empresas 97 condiciones de las que Iberdrola y sus socios han aceptado 39, aunque la mayoría de estas últimas con ciertas modificaciones.
Entre las propuestas de la OCC que rechaza Iberdrola se encuentran la distribución de un pago extraordinario de 128 dólares por cliente de las empresas de UIL en este estado (UI, CNG, y Southern), equivalente a un total de 88 millones de dólares, y la inversión de 202 millones de dólares en un fondo para clientes en un periodo de tres años.
Un portavoz de Iberdrola no hizo comentarios. La compañía tiene ahora hasta el 7 de julio para la presentación de documentos y para decidir si participará en el proceso de alegaciones orales dos días después, mientras que la decisión definitiva del supervisor de Conneticut está prevista para el 17 de julio.
Una fuente con conocimiento de la situación dijo que "en este tipo de situaciones, como ocurre con las revisiones tarifarias, son habituales las negociaciones entre las distintas partes".
Iberdrola anunció en febrero su intención de comprar UIL el mes pasado en una operación en efectivo y acciones valorada en algo más de 3.000 millones de dólares. Con la transacción, que contempla integrar UIL y la filial estadounidense de Iberdrola, la eléctrica española tendrá presencia en otros dos estados, una cartera combinada de más de 3 millones de clientes y 6.700 MW de potencia instalada conjunta.
Hasta la fecha, sólo ha aprobado la compra el regulador energético del estado de Nueva York, quedando pendiente la definitiva de Connecticut y las de Massachusetts y Maine.
Además, Iberdrola necesita el visto bueno regulatorio de varias autoridades federales como la Comisión Federal de Energía (FERC), el Departamento de Justicia, la Comisión Federal de Comercio (FTC), la Comisión sobre Inversiones Extranjeras y y la Comisión Federal de Comunicaciones ( FCC (MADRID:FCC)).
Las acciones de Iberdrola no reaccionaron el miércoles a este anuncio y cerraron con un alza del 0,9 por ciento en un mercado alcista.