MADRID (Reuters) - El Ibex-35 cerró el lunes con caídas de un 1,5 por ciento en un ambiente de incertidumbre por los disturbios en Hong Kong y un contexto desfavorable en los países de la periferia de la eurozona.
"Venimos de máximos y cualquier cosita hace que tengamos un recorte. Ahora se ha sumado la situación en Hong Kong, pero es una excusa más que hace que el dinero se retraiga", dijo Enrique Zamácora, director de renta variable de LINK Securities.
Manifestantes a favor de la democracia de Hong Kong desafiaron el lunes los gases lacrimógenos y los golpes de la policía para permanecer firmes en el corazón de este centro financiero global, en uno de los mayores desafíos políticos para Pekín desde la represión de la plaza de Tiananmen hace 25 años.
A estas noticias desfavorables también se añadía la información sobre que el BCE podría comprar, según un sondeo de Reuters, 200.000 millones de euros en activos de deuda privada en un año, lo que supone un fuerte descenso frente a los 300.000 millones de euros que preveía un sondeo anterior.
"Con los recientes datos económicos ciertamente débiles no casa muy bien que ahora el BCE vaya a comprar una cantidad menor de deuda privada", dijo Natalia Aguirre, directora de análisis de Renta 4.
Además, el enfrentamiento político entre el Gobierno central y la Generalitat de Cataluña acerca de la convocada consulta del 9-N en Cataluña sumaba incertidumbre, señalaron expertos.
"Este es un factor de incertidumbre más que se añade a las datos y noticias negativas que estamos viendo en esta jornada", según José Luis Martínez, economista de Citigroup en España.
En este contexto, la prima de riesgo española se mantenía en el entorno de los 127 puntos básicos.
El Ibex-35 cerró con una caída del 1,52 por ciento a 10.686 puntos tras ceder la semana pasada un 1,37 por ciento. En tanto, el índice europeo FTSEurofirst 300 bajó un 0,41 por ciento a 1.371,34.
En Italia, el FTSE Mibtel cayó un 1,29 por ciento.
"Esta semana habrá un compás de espera con volúmenes reducidos y algún repunte en algún momento hasta la reunión del jueves del BCE, si no se produce algo en alguno de los frentes que tenemos abiertos: Ucrania, Hong Kong, algún atentado del Estado Islámico... que marque la tendencia de los mercados", agregó Zamácora.
En España, los bancos, que están entre los valores más líquidos del mercado, figuraron entre los peores del Ibex-35.
Santander retrocedió 2,58 por ciento, mientras que BBVA bajó un 2,01 por ciento y Caixabank se dejó un 2,68 por ciento.
Dentro del sector, Bankia se desinfló un 2,52 por ciento, Banco Sabadell cayó un 2,83 por ciento, siendo el peor valor del selectivo, Bankinter, perdió un 1,92 por ciento y Banco Popular, retrocedió un 1,8 por ciento.
Apenas un puñado de valores consiguieron cerrar la jornada en positivo, entre ellos Amadeus, que avanzó un 1,81 por ciento y Enagás, con una revalorización del 1,39 por ciento.
Fuera del Ibex, Tavex subió más de un 14 por ciento a 0,234 euros por la opa de exclusión lanzada por su principal accionista a un precio de 0,24 euros por título.