Roma, 5 may (.).- El Gobierno italiano quiere acelerar la aprobación de proyectos de energías renovables, a los que ha reservado casi 70.000 millones de euros en su Plan de Recuperación, con medidas que simplifiquen la burocracia, que hasta ahora está frenando estas inversiones.
El ministro de Transición Ecológica, Roberto Cingolani, elegido por el primer ministro, Mario Draghi, para gestionar uno de los ministerios más relevantes del actual Ejecutivo, dijo este miércoles en un encuentro con la prensa extranjera que es fundamental que Roma abrevie los procesos de autorización de inversiones "verdes".
Cingolani, que fundó en 2005 el Instituto Italiano de Tecnología (IIT), sostuvo que Italia se ha comprometido a instalar hasta 70 gigavatios de nueva capacidad de energía renovable para 2030 y actualmente está en 0,8 GW por año, entre otras cosas por la lentitud en la concesión de los permisos.
"Si seguimos a este ritmo, llegamos a 2090. La situación es urgente", dijo, al tiempo que subrayó que trabaja en la elaboración de una lista de reformas estructurales que presentará al Ejecutivo antes de finales de mayo.
Italia estableció como objetivo en su último plan energético presentado a finales de 2019 tener 65 GW de nueva capacidad verde para la próxima década, pero el ministro avanzó que enviará una actualización "a finales de junio" para adecuarse a las nuevas metas establecidas por Bruselas.
Cingolani ya dijo en marzo que el Gobierno italiano quiere reducir las emisiones de carbono del país en un 60 % para 2030 y que Italia debe revisar su sistema de subastas de plantas de energía renovable para seguir el ritmo de otros estados del entorno, como España.
El Plan de Recuperación de Italia prevé destinar 68.600 millones de euros a planes de transición ecológica (59.300 millones del Mecanismo europeo de Recuperación y 9.300 millones de recursos nacionales complementarios) y es el área de intervención con más peso, seguida de la digitalización.