Tokio, 30 abr (.).- El grupo de aviación ANA (T:9202), el principal de Japón, registró el último ejercicio fiscal, que concluyó en marzo, unas pérdidas netas de 404.620 millones de yenes (3.716 millones de dólares), una cifra récord debido al impacto de la pandemia de la covid en el transporte aéreo.
En el ejercicio fiscal 2019 ANA se había anotado un beneficio neto de 27.655 millones de yenes (253 millones de dólares) y unas ganancias operativas de 60.806 millones de yenes (558 millones de dólares).
El grupo matriz de la aerolínea All Nippon Airways prevé, no obstante, volver a la rentabilidad en el ejercicio en curso con medidas como la suspensión de sus conexiones aéreas durante la pandemia y el recorte de su flota, según consta en sus resultados anuales publicados hoy.
En el ejercicio fiscal nipón 2020 finalizado el pasado marzo, ANA incurrió en unas pérdidas operativas de 464.770 millones de yenes (3.528 millones de dólares), mientras que su facturación se desplomó un 62,1 %, hasta los 728.680 millones de yenes (5.531 millones de dólares).
El sector aéreo "se ha enfrentado a unas condiciones de una gravedad sin precedentes debido al descenso dramático de la demanda de pasajeros a raíz de las restricciones fronterizas y las recomendaciones de no salir de casa", señaló en un comunicado el grupo nipón.
El tráfico doméstico de pasajeros disminuyó un 70,5 % durante el pasado ejercicio, hasta los 12,66 millones de viajeros, mientras que el número de pasajeros internacionales en Japón se hundió un 95,5 % hasta los aproximadamente 427.000, según ANA.
En el contexto de la pandemia, las autoridades niponas han recomendado a los ciudadanos evitar los desplazamientos durante los períodos vacacionales, en los que suelen producirse más viajes dentro del país.
Además, el Ejecutivo ha aplicado fuertes restricciones a la entrada de viajeros foráneos, y desde hace meses prohíben en la práctica el acceso al país de ciudadanos que no sean nipones o residentes extranjeros.
Sin embargo, ANA prevé volver a la rentabilidad gracias a sus medidas de reajuste del gasto y al esperado repunte del viaje doméstico e internacional conforme el proceso de vacunación avance en todo el mundo, señaló la compañía.
Para el presente ejercicio, que se extiende hasta marzo de 2022, el grupo espera embolsarse un beneficio neto de 3.500 millones de yenes (32 millones de dólares) y elevar su facturación en un 89 % hasta 1,38 billones de yenes (10.474 millones de dólares).