Madrid, 14 jun (.).- Los bancos que operan en España mantuvieron congeladas en mayo sus peticiones de fondos al Banco Central Europeo (BCE) por cuarto mes consecutivo, en 289.689 millones de euros, lo que podría deberse a que sus necesidades de liquidez se han reducido, según los expertos consultados.
Las entidades también esperan obtener más ingresos cuando suban los tipos de interés en la zona del euro, lo que ocurrirá en julio por primera vez desde 2016.
El BCE decidió la semana pasada comenzar a subir los tipos de interés en 25 puntos básicos en su reunión de julio para frenar el fuerte incremento de la inflación por la guerra en Ucrania, y anunció que volverá a aumentarlos en septiembre si así lo aconsejan los datos.
La entidad que preside Christine Lagarde también confirmó el pasado jueves que el 1 de julio finaliza el programa de compras de deuda pública y privada de la zona del euro ante la escalada de los precios.
Según los datos provisionales publicados hoy por el Banco de España, las cifras de mayo tampoco están muy lejos de las correspondientes al mismo mes de 2021, cuando las entidades nacionales pidieron 290.074 millones de euros al BCE.
En toda el área del euro, las peticiones de fondos también se mantuvieron inmovilizadas en 2,19 billones de euros, una cantidad que vienen rondando desde el pasado octubre.
En cuanto a los programas de compra de activos, el saldo vivo se redujo ligeramente en mayo hasta los 616.410 millones, desde los 616.510 millones que quedaban en vigor en el mes anterior.
En 2020 el BCE preveía normalizar su política monetaria, pero el estallido de la pandemia le llevó a volver a comprar deuda e inyectar más liquidez en el sistema, que las entidades querrán reducir al devolverle gran parte de los préstamos en junio, cuando la entidad deje de aplicar condiciones especiales muy ventajosas en las operaciones de refinanciación.