Tokio, 28 mar (.).- La Bolsa de Tokio cayó hoy con fuerza arrastrada por Wall Street y por las pérdidas del sector tecnológico, y borró así gran parte de las ganancias cosechadas en la víspera.
El índice Nikkei cerró con una caída de 286,01 puntos, un 1,34 por ciento, hasta situarse en los 21.031,31 puntos, mientras que el segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, perdió 17,57 puntos, un 1,02 por ciento, hasta las 1.699,56 unidades.
El parqué tokiota abrió con una clara tendencia a la baja en una nueva jornada de gran volatilidad, y ya durante el primer tramo de negociación se dejaron atrás las ganancias de la víspera, cuando el Nikkei subió un 2,65 por ciento.
Los inversores de Tokio siguieron así la tendencia de la bolsa de Nueva York, donde los principales indicadores cerraron en negativo el martes debido sobre todo a las firmas tecnológicas y financieras, aunque conforme avanzaba la jornada su caída próxima al 2,5 por ciento se ralentizó.
El Nikkei también se resintió por la recogida de beneficios y por el reparto de dividendos entre inversores, lo que incentivó las ventas, según destacaron analistas locales.
Otro factor negativo fue la persistente inquietud sobre una guerra comercial entre China y Estados Unidos tras las medidas arancelarias anunciadas por Washington y las represalias de Pekín.
Las pérdidas del sector tecnológico estadounidense, encabezadas por pesos pesados como Facebook (NASDAQ:FB) o el fabricante de chips Nvidia (NASDAQ:NVDA), repercutieron en fabricantes nipones de componentes electrónicos como Tokyo Electron (T:8035), que cedió un 4,4 por ciento, o Advantest (3,4 por ciento).
Asimismo, el conglomerado Panasonic (T:6752) cayó un 5,1 por ciento tras conocerse que la estadounidense Tesla (NASDAQ:TSLA), al que suministra baterías eléctricas, es objeto de una investigación de las autoridades de EE.UU. debido al accidente de tráfico protagonizado por uno de sus modelos.
Un total de 1.436 valores retrocedieron frente a los 571 que avanzaron, mientras que 46 terminaron el día sin cambios.
El volumen de negocio ascendió a 2,738 billones de yenes (20.949 millones de euros), por debajo de los 3,213 billones de yenes (24.399 millones de euros) de la víspera.